Ledezma llama a reforzar las protestas contra el chavismo
Luego de fugarse del país, el ex alcalde se reencontró con su familia en Madrid; "no permitamos que Venezuela se muera en nuestras manos", dijo
MADRID.- Al final de su huida de película, el opositor venezolano Antonio Ledezma anunció ayer en España que se dedicará a recorrer el mundo para vigorizar la protesta contra el gobierno de Nicolás Maduro y precipitar un cambio de régimen.
"Venezuela no está al borde del abismo. Está en el abismo, viviendo un colapso. No permitamos que Venezuela se muera en nuestras manos", dijo en el aeropuerto de Barajas, después de abrazarse con su esposa y sus hijas. Habían pasado poco más de 24 horas de su fuga de Caracas, donde llevaba un arresto domiciliario desde 2015.
Ledezma, alcalde de Caracas destituido por Maduro, apenas tuvo tiempo de acomodarse en Madrid. Cinco horas después de aterrizar lo recibió en el Palacio de La Moncloa el presidente Mariano Rajoy, que le transmitió "todo el apoyo" del gobierno español, lo invitó a quedarse el tiempo que crea necesario y le recomendó velar por la unidad de la oposición al chavismo.
La cancillería venezolana reaccionó con un comunicado de queja en el que describe la actitud de Rajoy como "la continuación de una larga lista de agresiones e injerencias" y califica la reunión como "un acto inamistoso".
Ledezma pasó más de mil días detenido acusado de conspirar para derrocar a Maduro. Fue uno de los líderes de las protestas que sacudieron Venezuela en 2014, en las que murieron 43 personas. Hoy representa al sector más intransigente de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que rechaza las iniciativas de diálogo que algunos opositores exploran con el gobierno.
"Voy a dar la vuelta al mundo y desde el exilio llevaré la esperanza de los venezolanos de salir de esta dictadura -dijo a la prensa en Madrid-. Estamos hablando del país que posee las mayores reservas de petróleo del mundo y de un gobierno que despilfarró una fortuna y que se robó más de 600.000 millones de dólares. Hoy tienen al pueblo de Venezuela sometido con la violencia del poder."
Apenas aterrizó en Barajas, Ledezma revivió su huida por tierra desde Venezuela hacia Colombia, en la que -según su versión- consiguió traspasar 29 controles policiales. Primero engañó a los agentes de inteligencia que hacían guardia en las afueras de su casa 24 horas al día. "El viaje por carretera fue una película de James Bond", comentó. Le tomó 24 horas cruzar el puente Simón Bolívar que lo depositó en Colombia.
Dijo que decidió huir porque lo estaban amenazando por su postura contra un proceso de diálogo que considera una trampa. "Venezuela está en un colapso definitivo. Sólo nos queda la moral y el estado de ánimo", denunció.
Su esposa, Mitzy Capriles, y sus dos hijas, Mitzy y Antonietta, lo esperaron en el aeropuerto acompañadas por el ex presidente colombiano Andrés Pastrana. "Llego a España y me siento libre, pero vengo con el alma desgarrada. Jamás pensé que tendría que emigrar de mi patria", dijo Ledezma, aferrado a una bandera venezolana.
Desde el exilio cree que puede ser más útil a la causa antichavista. ¿Da por terminada la acción coordinada de la oposición? "No puede haber unidad cuando hay contradicciones", respondió. Fue inclemente con el ex presidente español José Luis Rodríguez Zapatero, que intenta mediar entre el gobierno y la disidencia: "Desde que este señor llegó a Venezuela hay más presos políticos y ha habido más muertos".
Ledezma quiere salir de gira por varios países del continente, según anticipan en su entorno. Aspira a asistir la primera semana de diciembre en Bruselas a la entrega del premio Sájarov para la Libertad de Conciencia, que el Parlamento Europeo concedió a los presos políticos venezolanos.
La reunión con Rajoy fue el estreno del papel de embajador itinerante de la oposición que pretende cumplir. Duró una hora y media. El presidente del gobierno español le transmitió su compromiso de impulsar una solución a la crisis en Venezuela. Una salida "que pasa necesariamente por la liberación de los dirigentes encarcelados y la convocatoria a elecciones presidenciales", informaron fuentes de La Moncloa.
"Le pedí a Rajoy encabezar la búsqueda de ayuda humanitaria que sea administrada por las iglesias venezolanas -explicó Ledezma al salir-. El presidente nos dijo que nos sintiéramos como en casa; le insistí en que seré la voz de todos los presos políticos, perseguidos y exiliados que sufren las injusticias del régimen."