Miedo, destrucción y heridos en Israel tras la primera represalia de Irán luego de la intervención de Estados Unidos

JERUSALÉN.- La represalia iraní a la destrucción de las tres principales instalaciones nucleares de Irán –anunciada por Donald Trump cuando el reloj marcaba aquí las cuatro de la mañana locales–, llegó tres horas más tarde, a las 7.30. Fue entonces que el Comando del Frente Interno lanzó una nueva alerta, las sirenas ulularon en todo el país y todo el mundo, en el décimo día de la Operación León Ascendente, tuvo que bajar a los refugios.

Y una nueva andanada de misiles balísticos iraníes causó más destrucción, pánico entre los israelíes y al menos 27 heridos, según las primeras informaciones.

Los noticieros de televisión mostraban nuevas imágenes de destrucción por impactos en la ciudad portuaria de Haifa, en el norte y en el centro de Israel, en suburbios de Tel Aviv. Se veían edificios destrozados, autos destruidos, servicios de emergencia rescatando de los lugares bombardeados a familias enteras que salían asustadas, con niños en brazos, en pijama de entre cúmulos de escombros, polvo y ruinas.

La primera andanada incluyó 22 misiles y la segunda, 5, según evaluaciones de las Fuerzas de Defensa Israelí (FDI), que anunciaron nuevos ataques contra objetivos militares enemigos en el oeste de Irán.

“Hace poco, los lanzadores de misiles balísticos utilizados en el ataque contra Israel esta mañana fueron destruidos en los ataques”, informaron las fuerzas armadas. “Además, esta mañana, la Fuerza Aérea Israelí atacó varios lanzadores de misiles balísticos preparados y eliminó a soldados iraníes”, añadieron.

En la población israelí, que recibió con gran entusiasmo la noticia de que Trump finalmente decidió unirse a la ofensiva del primer ministro, Benjamín Netanyahu, contra su máximo enemigo y su amenaza nuclear, había sentimientos encontrados.

“Trump hizo algo bueno para todo el mundo. Nosotros queremos paz, no es buena esta guerra, pero la verdad es que los árabes nos quieren matar y esto no es justo”, dijo a LA NACION Aviva, una jubilada de 77 años que se encontró bloqueada en Jerusalén por la contraofensiva iraní. “Como siempre salí temprano de mi casa de Beit Shemesh para venir al gimnasio, pero ya estaba en ruta cuando a las 6 y 10 me llegó un mensaje en el celular de que estaba cerrado”, contó Aviva, que se refugió en un hotel del centro y que estaba a la espera de ver si los autobuses funcionaban para volver a su casa.

Madre de dos hijas, nacida en Bulgaria y llegada a esta tierra cuando era un bebé, en 1948 –fecha de creación del Estado de Israel–, enfermera profesional retirada, Aviva, que creció en Jerusalén, tuvo palabras de elogio hacia Trump y su decisión de intervenir en la cruzada antinuclear de Netanyahu.

“Lo que tenía Irán era peligroso para todo el mundo, él hizo algo bueno para todo el mundo”, subrayó, al asegurar que no tenía miedo por lo que puede pasar ahora. “No tengo miedo. ¿Qué podemos hacer? ¡Nada!”, comentó, fatalista. “Estados Unidos hizo muy bien”, insistió.

Noga Tarnopolski, periodista y analista israelí, no coincidió. “Pienso que Netanyahu apostó y tomó un riesgo absolutamente peligroso, insólito, cuando lanzó esta guerra en contra de Irán, sin saber si Trump lo iba a seguir, pero apostando con eso. Y vemos que por lo menos en esa apuesta ganó”, comentó, tras una consulta de LA NACION. “Eso no implica que los resultados lo van a justificar. Todavía no tenemos evidencia de que el programa nuclear iraní haya sido fatalmente impactado y lo que sí estamos viendo por ahora es que los iraníes cumplen con lo que prometieron: es decir, dijeron que iba a haber fuertes represalias en contra de Israel si se unía Estados Unidos, se unieron y eso está viniendo”, añadió, evidentemente alarmada.

“Ahí estamos, es un momento muy difícil de prever. Nunca en la historia moderna de la política y de la estrategia del último siglo, pasó algo así… No conozco otro momento como este, otra acción como esta entre Netanyahu y Trump, no sabemos si los Estados Unidos, que lanzaron ya bombas, van a seguir, si se unen a una guerra más larga”, planteó.

“Veo que el diplomático argentino Rafael Grossi (jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica - OIEA) dice que por ahora no se han detectado pérdidas nucleares en las zonas atacadas… Pero los hutíes de Yemen están amenazando y estamos en una guerra-guerra. No es una ciberguerra, una guerra moderna técnica, estamos en una guerra a la antigua y la cosa viene muy muy densa. Así lo veo yo, esto va a seguir y los iraníes, y hablo del gobierno iraní, no van a dejar que esto pase, la ofensa y el peligro para ellos de este bombardeo norteamericano no se puede exagerar. Yo creo que van a empezar con severas represalias adentro de Irán y severas represalias en contra de Israel. Y los proxies, los brazos iraníes fuera de Irán, van a atacar en Europa, en América Latina, en Estados Unidos. Creo que los vamos a ver operando en los próximos meses, años, no creo que esto termine pronto”, advirtió.

Por la mañana, pasadas las 6 locales, antes de la represalia iraní, tanto Netanyahu como el presidente de Israel, Isaac Herzog, agradecieron a través de sus redes sociales a Trump por su decisión de intervenir, algo con lo que venían presionando con fuerza desde hace días, sobre todo porque Israel adolece de las “superbombas” necesarias para darle el golpe de gracia a las plantas nucleares iraníes subterráneas, como la de Fordo, lo más preciado del régimen de los ayatollahs.

“El presidente Trump y yo solemos decir: ‘La paz se logra con la fuerza’. Primero viene la fuerza, luego la paz. Y esta noche, el presidente Trump y Estados Unidos actuaron con mucha fuerza”, exultó Netanyahu en su cuenta de X.

Le hizo eco Herzog. “En las páginas de la historia de la humanidad, este es un momento en el que los principios de libertad, responsabilidad y seguridad han triunfado. Un momento decisivo entre el eje del terror y el mal y el eje de la esperanza”, escribió el presidente, que agradeció a su par estadounidense y a todos los Estados Unidos.

“Este valiente paso contribuye a la seguridad de todo el mundo libre. Espero que conduzca a un futuro mejor para Oriente Medio y contribuya a la liberación urgente de nuestros rehenes cautivos en Gaza”, auspició. Aunque habrá que esperar.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron su alerta máxima ante la posibilidad de que Hezbollah se una al conflicto entre Israel e Irán, tras los ataques estadounidenses contra instalaciones nucleares en Fordow, Natanz e Isfahán. Según fuentes militares israelíes citadas por Haaretz, Hezbollah ha estado en alerta máxima desde el inicio de la ofensiva israelí contra Irán, pero hasta el momento no se han registrado ataques directos de la organización libanesa.

Las FDI informaron que el ejército está reforzando el frente norte y vigilando de cerca los movimientos de las milicias proiraníes, preparándose para múltiples escenarios de escalada en diversos frentes.

Por Elisabetta Piqué

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