Monti formó un gobierno sin políticos
Además de asumir como premier, estará al frente del poderoso ministerio de Economía; todos los demás ministros son tecnócratas
ROMA.- Con el desafío de salvar a Italia de la debacle y de recuperar la confianza de los mercados -aún totalmente alterados por la crisis de deuda que sigue castigando a la eurozona- quedó formalmente inaugurada ayer la era post-Berlusconi, con el nacimiento de un gobierno sin políticos y con tecnócratas, encabezado por el prestigioso ex comisario europeo, Mario Monti.
Este también será ministro de Economía, todo un mensaje para los mercados y para Europa en general.
Una figura de gran prestigio, totalmente opuesta al Cavaliere, Monti liderará un gobierno formado por banqueros, profesores universitarios y expertos, en muchos casos ex funcionarios con gran experiencia y alto perfil.
Un gobierno "super-técnico" que nadie se hubiera imaginado hace 15 días, que se formó en tiempos récord, dictados por la urgencia de una crisis que sigue alarmando a todo el mundo.
"Después de mi ronda de consultas llegué a la conclusión de que la ausencia de políticos facilitará la acción de mi gobierno", dijo Monti, un economista de 68 años, presidente de la Universidad Bocconi de Milán, que explicó que el país "está saliendo de una fase dialéctica demasiado vivaz".
Fue una forma elegante de decir que, aunque su gobierno obtuvo vía libre de las principales fuerzas políticas -el Partido del Pueblo de la Libertad (PDL), de derecha, y el Partido Democrático (PD), de centroizquierda-, sigue siendo enorme la animosidad entre ambas.
La tensión quedó en evidencia el sábado pasado, cuando hubo gritos e insultos en el Parlamento durante la votación sobre el plan de ajuste exigido por la Unión Europea (UE) que precedió la dimisión de Silvio Berlusconi.
Elegido en 2008, el Cavaliere , desgastado por diversos escándalos sexuales y de corrupción, se vio obligado a renunciar, acorralado por los mercados.
Cerrado el capítulo Berlusconi, la misión principal de "Supermario" será ahora rescatar a Italia del pozo en el que se encuentra debido a su colosal deuda pública, equivalente al 120% del PBI, y a su estancamiento económico. Y convencer a los mercados, que ayer siguieron castigando al país (el diferencial de rendimiento de los títulos a diez años italianos y alemanes se mantuvo muy alto), de que puede hacerlo.
"Obtuvimos señales de aliento de los socios europeos y del mundo entero", dijo Monti, optimista.
El misterio sobre los integrantes del gabinete se desveló pasado el mediodía. Después de reunirse en el Palacio del Quirinal -sede de la presidencia- con el jefe de Estado, Giorgio Napolitano, Monti primero aceptó oficialmente el encargo de primer ministro.
Acto seguido, en medio de gran expectativa, leyó la lista de ministros, que sorprendió por la presencia de profesores universitarios más bien desconocidos y por su carácter "supertécnico".
Los elegidos
Bajo el signo de la austeridad, el gabinete de Monti cuenta con 16 ministros, a diferencia del anterior gobierno de Berlusconi, que tenía 23. Además, se destaca por tener un promedio de edad de 64 años y tres mujeres en cargos clave: Interior, Justicia y Trabajo.
No se trata de "velinas" -chicas del mundo de espectáculo, como en el anterior gobierno del Cavaliere -, sino nombres de peso. Anna Maria Cancellieri, de 67 años, con gran experiencia en cargos al servicio del Estado, juró como nueva ministra del Interior; la abogada penalista Paola Severino, como ministra de Justicia, y Elsa Fornero, como titular de Trabajo.
Monti también contará con un "superministerio" de Desarrollo Económico, Infraestructuras y Transporte, encabezado por el conocido banquero Corrado Passera, un "bocconiano" que hasta ayer era el CEO del Banco Intesa Sanpaolo, uno de los más importantes de Europa.
Fiel a su estilo elegante y educado, al anunciar su gabinete el flamante premier tuvo palabras de deferencia hacia su desacreditado antecesor: "Saludo con respeto y atención a Silvio Berlusconi por el trabajo llevado a cabo".
En el gobierno de Monti también se destacó la presencia de Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de San Egidio -movimiento católico presente en todo el mundo, incluso en la Argentina-, para la nueva cartera de Cooperación Internacional e Integración, y de Fabrizio Barca en Cohesión Territorial, también nueva.
Como era de esperar, estos dos ministerios, que hablan a las claras de un cambio drástico de rumbo, le cayeron pésimo a la xenófoba y secesionista Liga Norte. "Es la enésima cachetada para nosotros", denunció Roberto Calderoli, ex ministro para las Reformas, que confirmó que su partido votará en contra del gobierno Monti, que esta noche se someterá a un voto de confianza en el Senado y mañana, en Diputados.
Monti, que después de la jura, tal como corresponde, fue al Palacio Chigi, sede del gobierno, para el simbólico intercambio de llaves con Berlusconi, designó canciller el embajador en Washington, Giulio Terzi Sant'Agata, ausente en la ceremonia de jura, que llamó la atención por la falta de aplausos y por la sobriedad.
Como ministro de Educación, en tanto, Monti nombró al académico Francesco Profumo, ex rector del famoso Politécnico de Turín y actual presidente del Consejo Nacional de Investigaciones; como titular de Cultura, a Lorenzo Ornaghi, rector de la Universidad Católica de Milán; en la cartera de Ambiente, a Corrado Clini; en Defensa, el almirante Giampaolo Di Paola; en Salud, a Renato Balduzzi, y en Agricultura, a Mario Catania.
El nuevo equipo de técnicos de Monti fue recibido con entusiasmo por la oposición de centroizquierda, la patronal, el establishment, la Iglesia Católica y hasta los sindicatos. Incluso Berlusconi, el gran derrotado, bendijo al nuevo Ejecutivo, al declarar: "Estamos en buenas manos".
EL NUEVO GABINETE
Corrado Passera
Ministro de Desarrollo Económico
Desde 2007 es presidente ejecutivo del mayor banco minorista de Italia, Intesa Sanpaolo. De 56 años, es un ex consultor formado en Estados Unidos que nunca ocultó sus simpatías por la centroizquierda.
Antonio Catricala
Subsecretario de la Presidencia
Un reconocido jurista de 59 años, presidía la Autoridad Antimonopolio italiana en 2005. Durante el gobierno de Prodi favoreció medidas de liberalización, y luego fue criticado por la izquierda por tomar decisiones favorables a Mediaset, el imperio mediático de Berlusconi.
Giulio Terzi di Sant’Agata
Canciller
Es un experimentado diplomático de 65 años que desde octubre de 2009 se encontraba al frente de la embajada de Italia en Washington, lo que le impidió asistir ayer al juramento del cargo. En el pasado representó a Italia ante la OTAN, la ONU e Israel.
Elsa Fornero
Ministra de Trabajo
Otra de las tecnócratas que integran el nuevo gabinete, Fornero, de 63 años, también se ocupará de Políticas Sociales, Bienestar e Igualdad. Es profesora de Economía en la Universidad de Turín y vicepresidenta del Consejo de Supervisión de Intesa Sanpaolo.
ANTE "UNA CRISIS SISTÉMICA"
ESTRASBURGO (Reuters).– La demora de la Unión Europea (UE) en solucionar la crisis de deuda soberana que afecta a varios países de la eurozona generó ayer una nueva ola de preocupación en líderes europeos y norteamericanos."Estamos de hecho enfrentándonos a una verdadera crisis sistémica que requiere un compromiso aún mayor por parte de todos y que podría requerir medidas adicionales y muy importantes", dijo ayer el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durão Barroso. Por su parte, el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, dijo que el bloque analiza quitar el derecho a voto a los países indisciplinados. "Habrá que analizar si debemos crear casos extremos para más sanciones, tales como la suspensión de los derechos de voto.