No cede la violencia en Gaza y Cisjordania
HEBRON.- Tras la retirada del ejército israelí de la ciudad autónoma palestina de Beit Jala, esta ciudad y distintos poblados de Cisjordania y la Franja de Gaza volvieron ayer a convertirse en escenario de ataques entre israelíes y palestinos en un retorno de la violencia que alertó incluso a los Estados Unidos.
El gobierno norteamericano decidió el cierre temporal de sus embajadas en Rumania y Bulgaria ante la eventualidad de que se produjeran ataques vinculados con el conflicto en la región.
Además, los Estados Unidos adoptaron medidas de seguridad extrema en todas sus delegaciones en la región por la tensión.
A la muerte del líder del Frente para la Liberación de Palestina (FPLP), Ali Abú Mustafá, por un misil israelí, ese y otros grupos islámicos amenazaron con atentar contra objetivos norteamericanos por considerar que ese país apoya, militar y políticamente, a Israel.
Sin embargo, uno de los líderes del FPLP, Maher al Taher, dijo ayer que esa agrupación retiró su amenaza de atentar contra los intereses norteamericanos y dijo que, por el contrario, promoverán "un boicot económico a los Estados Unidos".
La retirada israelí de Beit Jala fue posible tras un acuerdo entre ambas partes para que cesaran los ataques palestinos sobre el asentamiento judío de Gilo, al sur de Jerusalén. Pocas horas después, se reanudaron los ataques en distintas áreas de Cisjordania y Gaza.
El gobierno israelí, en tanto, intentaba ayer concertar un encuentro entre el canciller israelí Shimon Peres y el líder de la Autoridad Nacional Palestina, Yasser Arafat, para la semana próxima.
En el encuentro se buscaría acordar un alto al fuego gradual que ponga fin a 11 meses de violencia.
Al mismo tiempo, fuentes de la Unión Europea dijeron ayer en Jerusalén que el alto representante para la Política Exterior y Seguridad Común (PESC) de ese organismo, Javier Solana, iniciará pasado mañana una nueva gira por Medio Oriente.
Por otra parte, el primer ministro israelí, Ariel Sharon,visitó ayer el norte de Israel, acompañado por el jefe del Estado mayor, general Shaul Mofaz, y varios ministros, ante el temor generado por la presencia del movimiento chiíta libanés Hezbollah a lo largo de la frontera con el Líbano. Las fuerzas israelíes en ese sector fueron colocadas en estado de alerta máximo.
En la Argentina
- Fuentes del Ministerio del Interior dijeron ayer a LA NACION que el gobierno argentino puso en marcha un operativo reforzado de seguridad, a cargo de la Policía Federal y de las policías provinciales, en todos los objetivos pertenecientes a la comunidad judía en el país como consecuencia de la grave crisis que se vive en Medio Oriente.