Operación Amazonia: la inédita simulación de guerra de Brasil mientras escala la tensión con Venezuela

BRASILIA.- El Ejército de Brasil gastó seis millones de reales (aproximadamente un millón de dólares) solo en combustible, horas de vuelo y transporte para simular una guerra entre dos supuestos países en el Amazonas, en una operación militar sin precedentes.

Los militares decidieron recrear un campo de guerra en el que un supuesto país "Rojo" invadió un país "Azul", y fue necesario expulsar a los invasores. La simulación tuvo lugar en un momento de tensión con la vecina Venezuela, prácticamente al mismo tiempo que el gobierno brasileño decidió retirar las credenciales entregadas a los diplomáticos del régimen de Nicolás Maduro que trabajan en Brasil.

La operación involucró a 3600 militares y se concentró en las ciudades de Manacapuru, Moura y Novo Airão, en el Amazonas, en un radio de 100 a 300 kilómetros de Manaos.

La "guerra" simulada en la región amazónica ocurrió entre el 8 y el 22 de septiembre. El día 18 de ese mes, el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, realizó una visita a Roraima, una región fronteriza con Venezuela. El jefe de diplomacia de Donald Trump estaba en Boa Vista, a 840 kilómetros de Manacapuru, y fue copatrocinado por el canciller Ernesto Araújo.

La visita fue duramente criticada por haber tenido lugar durante la campaña electoral en la que Trump busca la reelección, por tener lugar en la región fronteriza y por enviar una señal bélica de la relación entre Estados Unidos y Brasil con Venezuela.

Lanzamiento de misiles

El monto gastado en la denominada Operación Amazonia, que incluyó el lanzamiento de misiles con un alcance de 80 kilómetros, fue obtenido por O Globo a través de la Ley de Acceso a la Información. El Ministerio de Defensa se negó anteriormente a proporcionar esta información.

"Dentro de la situación creada y con los medios otorgados, fue la primera vez que se realizó este tipo de operación", informó el Ejército en el informe. Los seis millones de reales gastados provinieron del Comando de Operaciones Terrestres (Coter). La Fuerza no reportó ningún otro gasto, aparte de combustible, horas de vuelo y transporte de civiles.

"Se utilizaron diversos medios militares, como vehículos, aviones, helicópteros, transbordadores, embarcaciones regionales, piezas de artillería, el sistema de lanzamiento de cohetes Astros del Ejército, cañones, ametralladoras, obuses Oto Melara y morteros de 60, 81 y 120 mm, además de vehículos especiales y camiones", dijo el Ejército.

En otras ocasiones ya se habían realizado simulaciones de conflicto y adiestramiento de personal militar, pero a menor escala, sin el uso de todo este equipamiento y sin una articulación entre el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea. O Globo también solicitó al Ministerio de Defensa y al Ejército, a través de la Ley de Acceso, información sobre el tamaño de las acciones pasadas, pero no obtuvo respuesta. Sin embargo, la Fuerza informó que la Operación Amazonas, tal como se hizo, no tiene precedentes.

El Ministro de Defensa, el General Fernando Azevedo e Silva, y el Comandante del Ejército, Edson Leal Pujol, se trasladaron a la región de "conflicto" el 14 de septiembre e hicieron seguimiento del disparo de misiles.

El sistema Astros, con múltiples lanzacohetes, se considera un proyecto estratégico para el Ejército y tendrá más recursos previstos en el Presupuesto 2021. La propuesta enviada al Congreso prevé 141,9 millones de reales para estos misiles en 2021. Este año, la previsión fue de 120,7 millones de reales.

Según información del Comando Militar de la Amazonia, el día 15, en el kilómetro 61 de la carretera AM-010, fueron disparados 20 cohetes de artillería del Ejército. El objetivo era "neutralizar una base militar enemiga". El Ejército dice que está trabajando en la fabricación de lanzacohetes con un alcance de 300 kilómetros.

Tres días después de la incursión de Azevedo y Pujol en la simulación de guerra, Pompeo visitó Boa Vista junto a Araújo. El presidente de la Cámara, Rodrigo Maia (DEM-RJ), calificó la visita de "una afrenta" al "orgullo de nuestra política exterior y de defensa". El canciller brasileño dijo que Brasil y Estados Unidos "están a la vanguardia de la solidaridad con el pueblo venezolano".

La guerra entre "azules" y "rojos" fue provocada por la invasión de "rojos" en territorio "azul", según la simulación realizada por el Ejército, involucrando a los militares en la "liberación" de territorios como las ciudades amazónicas de Manacapuru, Moura y Novo Airão. Según el Ministerio de Defensa, también hubo acciones en Rondonia.

Cambio de estrategia

En agosto, O Globo mostró el cambio en la estrategia del gobierno de Jair Bolsonaro del rol de las Fuerzas Armadas, con el pronóstico inédito de una "rivalidad entre Estados" a nivel regional y la necesidad de ampliar la presupuesto de defensa, que alcanzaría el 2% del PBI nacional.

La estrategia aparece en actualizaciones de documentos oficiales de las Fuerzas Armadas, la denominada Política y Estrategia de Defensa Nacional, enviada al Congreso. En los documentos, el gobierno de Bolsonaro prevé por primera vez la ocurrencia de "tensiones y conflictos" en áreas vecinas a Brasil.

A través de la oficina de prensa, el Ministerio de Defensa comunicó que la Operación Amazonas se llevó a cabo entre el 4 y el 23 de septiembre. Sin embargo, el Ejército dijo que el operativo se llevó a cabo entre el 8 y el 22 de septiembre.

"Fue un ejercicio de campaña con tropas en el terreno que simuló una acción convencional en el contexto de un amplio espectro y en un entorno operativo selvático. Las acciones se desarrollaron en una inmensa área y tuvieron como objetivo estratégico incrementar la operatividad del Comando Militar de la Amazonia. La operación consiste en una preparación importante para la principal actividad de las Fuerzas Armadas, en defensa de la soberanía nacional, especialmente en una región que tiene la prioridad de Brasil", dijo el Ministerio.

O Globo contactó al Ministerio de Relaciones Exteriores y a la Embajada de Estados Unidos sobre la visita de Pompeo al mismo tiempo que la guerra simulada del Ejército, pero no obtuvo respuesta.

O Globo/GDA