Primera charla: Joe Biden criticó a China por las denuncias de abusos y Xi Jinping le pidió que no se metiera

WASHINGTON (AFP).- Anoche los líderes de dos potencias mundiales hablaron por teléfono e intercambiaron opiniones. El estadounidense Joe Biden y el chino Xi Jinping mantuvieron su primera conversación tras la asunción del nuevo gobierno en el país norteamericano. De acuerdo con los medios, tocaron varios temas, incluso las denuncias de violaciones a los derechos humanos.

La cadena de noticias CNN publicó que en la charla Biden expresó a Xi su preocupación por la situación en Hong Kong y por la minoría musulmana de los uigures. Además, buscó plantear al jefe del Partido Comunista que los reclamos no refieren solo “a los valores estadounidenses, sino que se trata de valores universales”.

En un contexto de la escalada de tensiones entre los dos países y tras cuatro años de una gestión que se mostró combativa para con el gigante asiático, la del republicano Donald Trump, quien por ejemplo culpa al país por la pandemia de Covid-19 y habla de “virus chino”, Biden sin embargo mostró su voluntad de ser más tajante que su predecesor en temas relativos a los derechos humanos, pero de mantener cierta continuidad en cuestiones económicas.

Según el comunicado sobre la llamada divulgado por el gobierno estadounidense, Biden expresó sus “profundas preocupaciones” por la represión en Hong Kong, la posición más imponente de Pekín en la región y las “violaciones de los derechos humanos” en Xinjiang, región donde habitan los uigures. Y es que desde hace tiempo varios expertos denuncian que más de un millón de uigures están detenidos en campos de reeducación política pero Pekín rechaza el término “campos” y asegura que se trata de centros de formación profesional, destinados a brindar un empleo a la población y mantener a raya el extremismo religioso.

Ya en una retórica más cercana a la del gobierno anterior, Biden también denunció en la llamada las prácticas económicas “injustas y coercitivas” de Pekín, de acuerdo con la Casa Blanca. Y es que los planes del actual mandatario son llevar a cabo una revisión a fondo de la postura de la administración Trump hacia China, incluida su represión contra las prácticas comerciales desleales y las actividades militares antagónicas en Asia, y también concretar una estrategia sólida del Indo-Pacífico. Es decir, mantener buenas relaciones con China siempre que sea posible, mientras se denuncian otros asuntos, como sus abusos contra los derechos humanos.

Por su parte, en la agencia de prensa oficial de China se publicó una nota respecto de la llamada telefónica que cuenta que Biden saludó a Xi con motivo del Año Nuevo Lunar y que Xi puso freno a los reclamos del estadounidense. “Los temas relacionados con Hong Kong y Xinjiang, entre otros, son asuntos internos de China y conciernen a la soberanía e integridad territorial del país asiático, ante lo cual la parte estadounidense debe respetar los intereses fundamentales de China y actuar con prudencia”, enfatizó el mandatario comunista según Xinhua.

Xi también destacó que es importante mejorar las relaciones para colaborar juntos en varios temas, como la pandemia y el cambio climático, y destacó que una buen vinculo bilateral podría llevar un mensaje tranquilizador al resto de las naciones.

“Usted ha dicho que Estados Unidos se puede definir en una palabra: posibilidades. Esperamos por eso que las posibilidades apunten ahora hacia una mejora de las relaciones entre China y EE. UU.”, dijo Xi a Biden.

Las sanciones

Un responsable de la administración estadounidense, que habló bajo anonimato, destacó que el nuevo equipo de gobierno coincide con el anterior en seguir haciendo frente a Pekín en el marco de la “competición estratégica” entre las dos potencias.

Asimismo reafirmó que se mantendrán de momento los aranceles impuestos por Trump a los productos chinos, a la espera de una revisión global de la estrategia comercial. “Habrá cambios en nuestra política comercial frente a China pero no serán inmediatos y, en el intervalo, no eliminaremos los aranceles”, dijo.

En una entrevista emitida el domingo en CBS, Biden advirtió que la rivalidad entre China y Estados Unidos se transformará en una “extrema competencia”, aunque al mismo tiempo aseguró que quiere evitar un “conflicto” entre los dos países.

Consultado sobre su homólogo chino, Biden señaló: “No tiene, y no lo digo como una crítica, sino que es una realidad, un solo hueso democrático en su cuerpo. No lo voy a hacer de la forma en que Trump lo hizo. Vamos a centrarnos en las reglas internacionales”.

En este marco ayer el presidente anunció que el Departamento de Defensa estableció un grupo de trabajo centrado en la estrategia de Estados Unidos hacia China. Además afirmó que el grupo de trabajo contaría con expertos civiles y militares y proporcionaría recomendaciones “dentro de los próximos meses” sobre “prioridades clave y puntos de decisión”.