Tragedia en Italia: un barco con migrantes se estrelló contra una roca y murieron al menos 58 personas, entre ellas, varios niños

ROMA.- Este domingo a primera hora 58 personas murieron, incluyendo niños, cuando una embarcación que transportaba migrantes se estrelló contra unas rocas cerca de la costa del sur de Italia, informaron las autoridades a la Agencia Reuters. Esto volvió a encender la discusión sobre el abordaje de la política migratoria en ese país europeo.

El barco había zarpado de Turquía hace varios días con migrantes de Afganistán, Irán y varios otros países, y chocó mientras atravesaba una tormenta cerca de Steccato di Cutro, un balneario en la costa este de Calabria.

El número provisional de muertos se situó en 58, dijo a Reuters Manuela Curra, funcionaria del gobierno provincial. En tanto, 81 personas sobrevivieron y hay 20 hospitalizadas, una en cuidados intensivos, afirmó. Asimismo, uno de los hombres que se salvó fue arrestado por cargos de tráfico de inmigrantes, dijeron desde la Policía de Aduanas de la Guardia di Finanza.

El alcalde de Cutro, Antonio Ceraso, precisó que entre los fallecidos había mujeres y niños. La cifra exacta de cuántos menores murieron aún no están disponibles. Con la voz entrecortada, el funcionario sostuvo al canal de noticias SkyTG24 que había presenciado “un espectáculo que no querrías ver, una visión espantosa, que se te queda grabada para toda la vida”.

Los restos de la goleta de madera, un velero turco, quedaron esparcidos por una gran extensión de costa. Curra indicó que el barco partió de Izmir, en el este de Turquía, hace tres o cuatro días, y agregó que los sobrevivientes dijeron que había entre 140 y 150 personas a bordo. Quienes se salvaron eran en su mayoría de Afganistán, así como algunos de Pakistán y un par de Somalia, comentó, a la vez que remarcó que identificar las nacionalidades de los muertos será más difícil.

“Muchos de estos inmigrantes procedían de Afganistán e Irán, huyendo de condiciones de gran penuria”, dijo por su parte el presidente italiano, Sergio Mattarella.

Los primeros informes de ANSA y otras agencias de noticias italianas hablaban de 27 cadáveres arrastrados por la corriente hasta la playa y de otros encontrados en el agua, un número que después se elevó a más de 40. Ignazio Mangione, un funcionario de la Cruz Roja italiana, expresó en SkyTG24 que muy pocos de los niños que se cree que estaban en el barco sobrevivieron.

Todavía no hay un número confiable de personas que estaban a bordo. Según algunos supervivientes habría unos 180. Para otros serían más, al menos 250.

Polémica por la política migratoria

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, expresó su “profundo pesar” por el mortal incidente y prometió poner fin a la inmigración irregular para evitar más fallecidos en el mar. Su gobierno de derecha adoptó una línea dura en esta materia desde que asumió el poder en octubre, sobre todo al restringir las actividades de las organizaciones benéficas de rescate de migrantes con nuevas y duras leyes.

Meloni acusa a estas agrupaciones de alentar a los inmigrantes a realizar el peligroso viaje por mar a Italia, como los llamados “factores de atracción”. Mientras, las organizaciones rechazan estas definiciones, al asegurar que los inmigrantes parten sin importar si hay botes de rescate en las cercanías.

”Bloquear a las ONGs en el Mediterráneo tiene un solo efecto: más muertes en el mar”, tuiteó la entidad benéfica española de rescate Open Arms como reacción al naufragio del domingo.

En una declaración separada, el ministro del Interior italiano, Matteo Piantedosi, dijo que era “esencial” poner fin a las travesías marítimas. El dirigente entendió que se les ofrece a los migrantes el “espejismo ilusorio de una vida mejor” en Europa, y que se enriquecen así los traficantes y causan tragedias como las de hoy.

Desde El Vaticano, el Papa Francisco, hijo de inmigrantes italianos en la Argentina y un firme defensor de los derechos de los migrantes, expresó que rezaba por todos los atrapados en el naufragio. “Me enteré con dolor del naufragio que tuvo lugar en la costa de Calabria. Ya se han recuperado cuerpos, entre ellos muchos niños. Rezo por cada uno de ellos, por los desaparecidos, por los demás migrantes sobrevivientes”, afirmó el Sumo Pontífice durante el Angelus.

Italia es uno de los principales puntos de desembarco de los inmigrantes que intentan entrar en Europa por mar. La llamada “ruta del Mediterráneo central” es conocida como una de las más peligrosas del mundo.

El Proyecto de Migrantes Desaparecidos de las Naciones Unidas registró más de 17.000 muertes y desapariciones en el Mediterráneo central desde 2014. De momento, se estima que más de 220 personas murieron o desaparecieron este año.

Con información de Reuters y ANSA

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