Morena Rial reveló que demandará a Silvia D’Auro por abandono: “No sé para qué nos adoptó”

Jorge Rial y Silvia D’Auro estuvieron en pareja durante 21 años, y durante su matrimonio adoptaron a Morena y Rocío. En 2012 le pusieron punto final a su relación, y a partir de ese momento se hicieron reclamos cruzados sobre sus hijas. A una década de la conflictiva separación, la hija del conductor reveló cómo es su vínculo con su madre y aseguró: “La Justicia se va a encargar”.

En un ida y vuelta con sus seguidores de Instagram, Morena Rial fue contundente cuando le preguntaron cómo está su relación con su madre: “Gracias a Dios no tengo nada que ver con esa señora, ni contacto, pero la Justicia se va a encargar porque yo ya le pedí a mi abogado que quiero que se haga cargo de todo lo que no se hizo cargo en este tiempo”. En este sentido, detalló que junto al letrado Alejandro Cipolla van a demandarla por abandono.

“Hace once años desapareció y dejó a dos menores con su papá, que gracias a Dios nos supo criar muy bien. Comprendo que lo que ella hizo fue abandonar”, aseguró mientras le hablaba directo a la cámara. “No entiendo para qué m… nos adoptó si nos iba a terminar abandonando”, opinó enojada.

Según la hija del exconductor de Intrusos, la empresaria no volvió a tener contacto fluido después de la separación y ahora le iniciará acciones legales. Recordemos que en mayo de 2019 la hija de Rial estuvo invitada en Cortá por Lozano (Telefe) y abrió su corazón sobre los malos recuerdos que tiene de su infancia: “Cuando yo era chiquita me sentó en una mesa, prendió el televisor, me hizo ver Cuestión de peso y me dijo que yo iba a terminar así”.

“Me decía de todo. Una vez en una nota dijo ‘aparte de gorda, adoptada’, la verdad hay personas que no tienen perdón”, dijo la joven de 22 años en la misma entrevista. Después de luchar contra la discriminación que recibía, decidió hacerse el bypass gástrico en julio de 2016 y logró bajar 50 kilos.

Desde hace varios años que la hija de Rial se muestra cerrada a cualquier tipo de contacto con su madre adoptiva: “Silvia era lo contrario a una madre. Y mi papá trabajaba muchas horas, pero cuando estaba en casa era presente; ella nos retaba todo el tiempo y nos decía que si le contábamos algo a papá, al día siguiente iba a ser peor”.

En el diván de Verónica Lozano también contó cómo fue la última vez que se vieron frente a frente: “Le pedí todas mis fotos para hacer el video de mi fiesta de 15, y tuve que recuperar las imágenes de todos lados, porque no me las quería dar; me dijo que las había quemado”. Dos años más tarde finalmente le entregó las fotografías, pero las cosas no terminaron bien: “Se puso toda nerviosa, llamó al mozo para pedir la cuenta, me dio lo mío y no la vi más, no sé nada de ella y tampoco quiero saber”.

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