Pamela Anderson: "No quiero perseguir la juventud, quiero envejecer"

Hace tiempo que Pamela Anderson viene dando algunas señales del vuelco que quiere darle a su vida. Sin embargo, la imagen de la pulposa rubia que se convirtió en todo un icono de los 90 parece ser una sombra difícil de espantar...

Por estos días, la ex Baywatch divide sus días entre el proteccionismo animal y varios compromisos laborales que la tendrán ocupada gran parte del año; la mayoría de ellos, por cierto, tienen que ver con el modelaje. En diálogo con la revista Parade, ella se mostró muy sorprendida de que, a los 47 años, sea el aspecto físico su medio de vida. "Nunca me sentí lo suficientemente linda para ser modelo. Creo que he provocado sensaciones por como luzco, no tanto por bella sino por ser un poco traviesa", explicó entre risas.

En ese sentido, Pam quiso explayarse acerca de lo que significa para ella la belleza: "Mi mamá siempre me dijo que se trata de algo interno. Y se que puede sonar a cliché, pero creo que es así. Por eso siento que la belleza es eterna".

La siguiente pregunta, entonces, apuntó a cómo se llevaba con el paso del tiempo. Y aquí vino la sabia y sorprendente declaración de la blonda. "No quiero perseguir la juventud, quiero envejecer. Quiero experimentar todas las etapas de mi vida sin tener miedo. Creo que en esta industria estamos rodeados de miedos a volvernos viejos y a que esa belleza nos abandone. Entonces pienso: 'Bueno, tengo suerte, porque nunca me sentí especialmente bella'. Sí siento que me divertí, que pude ser sexy, que pude ser provocativa y que pude usar mi imagen para atraer la atención sobre las cosas que realmente me importan", concluyó Anderson.