No hay banda: el enorme camino del artista con su poderío y fragilidad

★★★★★ Autor, director e intérprete: Martin Flores Cárdenas. Escenografía: Ruslan Alastair Silva. Música original: Fernando Tur, Martín Flores Cárdenas. Sonido: Ramiro Vergara. Producción: Valeria Casielles. Sala: Casa Teatro Estudio, Guardia vieja 4257. Duración: 45 minutos. Funciones: lunes y viernes, a las 20.30.

Si el experimentador es quien se anima a salir del perímetro y dar un paso por fuera de su zona de seguridad o por los espacios ya probados por otros creadores, la última propuesta del director Martín Flores Cárdenas es una oda a ese momento frágil, incierto y poderoso de la experimentación.

“No creo que sea teatro documental. Tampoco una conferencia performática. En realidad no es nada”, dice el autor, director y único intérprete de su espectáculo No hay banda, en el cual se anima a exponer un momento de su vida, para investigar los procedimientos para construir ficción y los relatos que nos generamos para explicarnos el mundo.

Su obra atraviesa un hecho personal: la muerte de un ser querido y desde ahí genera preguntas existenciales y al mismo tiempo investiga su propio oficio: ¿Cómo funciona una obra de teatro? ¿Cuáles son las convenciones que nos permiten creer en eso que vemos representado? En aquellas preguntas estructurales, este artista indaga sobre la complejidad de la actuación: ¿qué es actuar ¿Se puede actuar lo mínimo? y se sumerge en la pregunta sobre cómo armar una nueva convención: imágenes, proyecciones, audios de WhatsApp, micrófonos, un teclado, un relato y un universo entero atravesado por imágenes poéticas que él logra capturar en su escritura. Su obra performática es un presente absoluto para recuperar un momento del pasado y, a su vez, lanza flechas imaginarias hacia el futuro. En el camino, vemos el trabajo del artista en su intento de generar una nueva conceptualidad.