La pequeña localidad cercana a Asheville conocida como el “pueblo de Navidad” de Carolina del Norte
Durante la temporada festiva, sus calles históricas se llenan de luces, decoraciones y eventos para toda la familia
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LA NACION
Hendersonville, una pequeña localidad ubicada a solo una hora de Asheville, en Carolina del Norte, es conocida por su ambiente y su tradición navideña. Cada año, durante la temporada festiva, la ciudad se transforma en un verdadero “Pueblo de Navidad”, una atracción que atrae tanto a locales como a turistas que desean experimentar un rincón especial de la Navidad en las montañas Apalaches.
La ciudad se distingue por su capacidad para capturar el espíritu navideño de una manera auténtica. Desde principios de noviembre hasta finales de diciembre, la ciudad se llena de luces brillantes, decoraciones festivas y eventos temáticos que hacen que tanto residentes como visitantes se sientan parte de una celebración continua.
Hendersonville, el “pueblo de Navidad” de Carolina del Norte
Las calles del centro histórico se visten con decoraciones que evocan un ambiente de cuento de hadas, mientras que las vitrinas de las tiendas se adornan con motivos navideños. Los árboles de Navidad, luces y adornos son solo algunos de los detalles que convierten a Hendersonville en una de las localidades más festivas de Carolina del Norte.
Además de su pintoresco centro urbano, Hendersonville ofrece a los visitantes un clima perfecto para disfrutar de una atmósfera navideña, según visithendersonville. En medio de las montañas, la ciudad suele tener temperaturas frías, lo que refuerza la sensación de estar en un pequeño pueblo navideño.
Tradición navideña en el centro de la ciudad
Uno de los principales atractivos durante la temporada navideña es su centro histórico, que se convierte en un lugar ideal para pasear. Las calles principales se llenan de luces y decoraciones que invitan a los turistas a recorrerlas mientras disfrutan de la música festiva y el bullicio de las tiendas locales. El evento más esperado del año es el desfile anual de Navidad, que recorre el centro de la ciudad y atrae a miles de personas. En él, desfilan carrozas decoradas con motivos navideños, bandas de música, personajes tradicionales y, por supuesto, la llegada de Santa Claus.
El evento también incluye una competencia de casas y comercios decorados, que a lo largo de los años generó una competencia amistosa entre los residentes y negocios locales para ver quién tiene la mejor decoración navideña. Las luces brillan en cada esquina, y las vitrinas de las tiendas se llenan de productos especiales para la ocasión.
Un destino para las familias
Además de las luces y las decoraciones, la ciudad ofrece una serie de actividades para toda la familia. Desde patinaje sobre hielo en el parque local hasta mercados navideños que venden artesanías locales y productos típicos de la temporada, Hendersonville se asegura de que todos tengan algo que hacer durante las festividades. Para los niños, una visita a Santa Claus es una tradición que nunca pasa de moda. Cada año, el centro de la ciudad organiza encuentros con el “Paseo de Santa”, una actividad que permite a los pequeños entregarle sus cartas al hombre más esperado de la Navidad.
La ciudad también cuenta con varios eventos musicales durante el mes de diciembre. Los coros locales y las bandas de música ofrecen conciertos de villancicos y música tradicional navideña, creando un ambiente cálido y festivo en cada esquina.
La magia de las montañas en Navidad
Hendersonville no solo es conocida por sus decoraciones y eventos, sino también por su entorno natural. Los visitantes pueden disfrutar de caminatas suaves por los senderos cercanos, rodeados de bosques que lucen especialmente hermosos con las primeras nieves del invierno.
Las actividades al aire libre, como el senderismo y el paseo en bote, se combinan con el ambiente festivo para ofrecer una experiencia única. Las montañas Apalaches, en su mayoría cubiertas por bosques de pinos y robles, permiten a los turistas disfrutar de un paisaje idóneo para capturar recuerdos fotográficos y crear nuevas tradiciones familiares.
La gastronomía navideña de Hendersonville
Durante las festividades, la ciudad cuenta con una oferta gastronómica excepcional que abarca tanto los sabores tradicionales como los toques locales. Restaurantes y cafés del centro ofrecen menús especiales de Navidad, con platos típicos de la temporada como pavo, jamón glaseado, y una variedad de postres caseros, como tarta de manzana y pastel de calabaza. La ciudad también es famosa por su sidra de manzana artesanal.
Los mercados navideños son otro lugar clave para disfrutar de la gastronomía local. Muchos de ellos venden productos artesanales, pero también ofrecen una gran variedad de delicias navideñas, desde panecillos especiados hasta chocolates y galletas decoradas.
Un destino fuera de temporada
Aunque Hendersonville es conocida por su espíritu navideño, la ciudad también ofrece atractivos durante todo el año. Su ubicación, en el corazón de las montañas Apalaches, la convierte en un destino ideal para quienes disfrutan del aire libre y las actividades de montaña. Desde la primavera hasta el otoño, la ciudad alberga una serie de festivales, mercados y actividades para todo tipo de visitantes, convirtiéndola en un destino turístico popular incluso fuera de la temporada navideña.
Sin embargo, es durante la Navidad cuando la ciudad brilla con una luz especial, transformándose en el “Pueblo de Navidad” de Carolina del Norte.
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