
Reseña: Venus en cuarentena, de Vicente Palermo
Doce cuentos muy bien construidos componen Venus en cuarentena, colección narrativa del escritor y sociólogo Vicente Palermo (1951). “Buzón carmín: colapsos” –por su extensión prácticamente una nouvelle– se inicia con el proyecto artístico de instalar un parque de buzones (“Queremos que los buzones vuelvan a la vida en un marco de perfecta relación con el medio ambiente.”) y termina siendo una intrincada tesis satírica sobre estos elementos del servicio postal tradicional.
“Alexanderplatz” estudia la posibilidad y las dificultades de “forjarse un nuevo presente” en una época pasada (“los años inmediatamente posteriores a la Comuna de París”) mientras el narrador de “Después amar” repasa los aspectos conflictivos de su vínculo amoroso con una mujer. “Cometo un plagio”, por su parte, aporta conceptos sobre el significado de copiar una obra ajena, pero también sobre el tiempo y la vejez.
Algunas historias como “Una gorra escocesa”, la que da título al libro, “Ribelles” o “De nada” preservan una atmósfera enigmática que ofrece un desenlace incierto y obliga a una relectura. En estas tres últimas, al igual que en “Leo” (los ambiguos celos que el amante de una contrabajista siente de su instrumento), el autor explora diversas dimensiones de la pulsión erótica sin caer en obviedades, atento más bien a los sutiles juegos mentales del deseo.
El punto de partida de “La aventura del Clavileño” es una conversación sobre el Quijote entre un profesor de literatura y unos alumnos de la escuela secundaria, que luego desemboca en una compleja interpretación de ese episodio de la novela de Cervantes de la cual se extrae una conclusión aplicable a la política dominada “por el negocio hipócrita de la mentira”.
Dos bibliotecas aparecen en dos escenarios muy diferentes. La de “La fronda” pertenece a una poeta fallecida. Durante el velatorio, su sobrino va examinando ese conjunto de libros y encuentra, en el volumen de una enciclopedia, un misterioso soneto. El dueño de la biblioteca de “Ella”, cuyo argumento conduce a un final sorpresivo y violento, es el marido de la cantante de un café que entabla una extraña amistad con un cliente obsesionado por la idea del suicidio.
En varios de los cuentos, el rumbo narrativo se orienta hacia la reflexión filosófica y la exposición ensayística, un recurso empleado con eficacia por escritores tan disímiles como Borges y el Sartre de La náusea.
En el caso de Palermo, sus fragmentos analíticos a veces constituyen el punto central de la trama, pero siempre consiguen eludir la tentación de una vacua solemnidad gracias a la sabia ironía que predomina en todos los cuentos del libro.
Venus en cuarentena
Por Vicente Palermo
Hugo Benjamín
235 páginas, $ 32.000





