Recibió una carta enviada hace 62 años que la estremeció: “Los veremos antes de que reciban esto”

Una mujer estadounidense se llevó una emocionante sorpresa al revisar su correspondencia y descubrir una antigua postal escrita con una caligrafía que le sonaba muy familiar.

Carol Hover, de 57 años, vive en Hornell, una pequeña ciudad del estado de Nueva York. Según consignó Washington Post, en abril de este año, la mujer se puso a ver durante el almuerzo qué cartas habían llegado a su buzón. Ahí fue cuando se quedó sin palabras. La misteriosa postal estaba fechada el 30 de agosto de 1960, justo la época en que sus padres estaban de luna de miel en Canadá. Y estaba dirigida a sus abuelos, cuya casa compró hace 21 años. “Los veremos antes de que reciban esto”, decía la nota.

“Mi madre -que murió en 2014- siempre tenía una letra muy característica: los remolinos y las curvas”, explicó Carol y contó que la primera postal le llegó el 19 de abril. Cuando la llevó a la oficina de correos local para mostrársela a algunos conocidos que trabajan ahí, se disculparon con ella y responsabilizaron a un cartero sustituto que estaba trabajando ese día. Pero cuando les explicó que ella era pariente tanto del remitente como del destinatario de las postales, el empleado le dijo que había dos tarjetas más en la parte de atrás. Una fue enviada desde Nueva York por su padre en 1969. La segunda era de los tíos de Hover, de un viaje que hicieron a Gran Bretaña en 1974.

Como si fuera poco, una semana y media más tarde recibió otra postal. También era de sus tíos, que estaban de visita en Francia en 1980. “Extraño mucho a mis padres. Y recibir una carta de ellos es tan especial”, reflexionó.

Un vocero del Servicio Postal de EE.UU. le dijo a Washington Post que en situaciones como estas, las postales generalmente son “encontradas por alguien y luego depositadas en una de nuestras cajas de recogida”.

“Posiblemente estaban guardadas en una casa recién comprada y los nuevos inquilinos las reintrodujeron en nuestra red con la esperanza de que podamos reunir las postales con los legítimos familiares”, dijo Tom Ouellette, del Servicio Postal, a través de un comunicado. Y señaló que otra opción es que hayan sido compradas en una tienda de antigüedades y a través de internet, y luego devueltas al sistema de correos.

Pero la historia no terminó ahí. A principios de mayo, Carol recibió un llamado de su prima, Karen Kohnke, para decirle que también había recibido una postal. Originalmente, fue enviada por un amigo de la familia que visitó Irlanda en 1983 a la casa de su infancia en Minnesota. Los actuales propietarios del hogar la habían buscado y se la estaban enviando por correo, le explicó.

“Me quedé atónita. Nunca pensás que algo así puede llegar a suceder. Es una pequeña cápsula del tiempo”, dijo Karen, también de 57 años, según consignó Washington Post.

En los meses siguiente, la prima de Carol se enteró además de la existencia de otras dos postales: una que enviada por una familia que visitó Escocia en 1984 y la otra por sus padres, mientras estaban de vacaciones en Fiyi en 1981. “Nunca me había hecho tanta ilusión volver a casa y mirar el correo, con o sin facturas”, aseguró la mujer cuya increíble historia se hizo viral.

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