Un depto reciclado en Palermo con impronta moderna
En un edificio del arquitecto Jorge Ferrari Hardoy (conocido por la famosísima silla BKF), este departamento recuperó todo su brillo gracias al gusto y la dedicación de un experto
* Mi barrio: Palermo. En ningún lugar del mundo encontré una zona tan heterogénea, donde podés ir caminando de una punta a la otra y reconocer diez ciudades distintas en su arquitectura, su gente, sus espacios verdes. Es fascinante. Palermo es como muchos mundos adentro de un barrio.
* Si quiero disfrutar de un café, voy a Croque Madame, en los jardines del Museo de Arte Decorativo.
* Para una salida con alguien que no es de acá elijo Milion, en Recoleta.
* Un edificio que nunca me canso de mirar es la Biblioteca Nacional, de Clorindo Testa. Otro que me fascina es el del ACA, sobre Avenida del Libertador. Un ícono.
* Algunos de mis diseñadores locales favoritos: Federico Churba, Jessica Trosman, Dubié, Juan Henández Daels.
* Lo que me enamora de Buenos Aires es cómo florece en primavera; el color de los jacarandás no tiene competencia.
- Entrando al departamento, un pasillo circular deriva a los cuartos o, hacia el frente, a la zona del living-comedor con balcón corrido a la calle.
- La cocina, de disposición alargada, está en la misma línea del comedor haciendo una ‘L’ con el ambiente más importante.
- El dormitorio principal tiene vestidor y baño en suite. Además hay otra habitación, un baño completo y un toilette.
Texto: Lucrecia Álvarez.
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