Usaron el dinero de su luna de miel para convertir un micro escolar en un motorhome y el resultado es increíble

La pandemia del coronavirus trajo muchos cambios en las modalidades de trabajo y en las elecciones de vida de las personas. Parece que los días de cumplir horarios en oficinas pasaron de moda y cada vez son más quienes deciden emprender una vida apuntada a viajar por el mundo. Y esta fue la decisión que tomaron Amanda Smith y Owen Kozac que apostaron sus ahorros a crear una increíble casa rodante que les permitirá moverse cuándo y por dónde quieran.

A diferencia de otros matrimonios que usan el dinero que como regalo en su casamiento para la construcción o decoración de su hogar, esta pareja tomó otro camino. También destinaron los regalos de boda a su casa, pero con la diferencia de que está sobre ruedas.

De esta manera, Amanda Smith, de 25 años, y Owen Kozac, de 24, sorprendieron a sus familias y, sin previo aviso, utilizaron los fondos de su luna de miel para convertir un viejo micro escolar en un paraíso de colores pastel que les brindará la posibilidad de cumplir su sueño: una vida en la ruta.

Para ellos, la pandemia del coronavirus tuvo dos caras. Por un lado, les permitió afianzarse en la modalidad de trabajo remoto para poder viajar pero, al mismo tiempo, les retrasó el viaje de sus vidas. En los meses previos a los estrictos confinamientos impuestos en casi todos los países del mundo, la profesora y su pareja, que es editor de video, utilizaron el reembolso de su viaje para comprar un viejo micro escolar amarillo americano por 9500 dólares.

Si bien en su momento la noticia de la pandemia les impactó, aprovecharon el tiempo para encarar la construcción de su nuevo hogar. Así, gastaron sus ahorros en reformar el vehículo y el resultado que compartieron a través de las redes sociales es impresionante. Como se puede ver en el video, el motorhome que crearon puede ser el sueño de muchos: una bonita caravana cuidada e ideal para emprender nuevos viajes juntos.

Las imágenes publicadas en EuropaPress, empiezan con una vieja fotografía del autobús escolar y, cuando quitan el celular con la imagen de la toma, se aprecia el increíble resultado. Recubrieron el interior con madera y lo completaron con todas las comodidades y una decoración muy cuidada con cuadros y plantas.

Su casa rodante cuenta con una cama para ambos, mesas, baño con ducha y agua caliente, y una cocina que funciona con una garrafa a gas.

Allí podrán vivir sin inconvenientes para cumplir su objetivo de recorrer Europa, como primer paso de su odisea. Luego de casi dos años de pandemia, la pareja afirmó a EuropaPress, que ahora sí tienen todo en condiciones para poner en marcha su caravana y llevar adelante su sueño.