La acción demencial de Boko Haram
Sus ataques no gozan de ningún apoyo en el mundo islámico y los secuestros dieron lugar a todo tipo de condenas
Hace más de un mes, 300 adolescentes nigerianas fueron secuestradas por Boko Haram, un grupo surgido en el norte de Nigeria en 2002 que se ha ido radicalizando desde 2009. El objetivo del grupo es establecer un Estado islámico "puro", que siga estrictamente la ley islámica o Sharia. Se denominan "musulmanes verdaderos" y, en consecuencia, rechazan toda interpretación o versión del islam que no coincida con la propia. Se oponen especialmente a la educación en Nigeria, que ven como secular y occidental, porque consideran que amenaza y está en contra de la fe islámica.
No hay que confundir el Islam con las acciones de grupos demenciales como Boko Haram
El islam, como toda religión, permite múltiples interpretaciones, dando lugar al surgimiento de distintas corrientes, con algunas que se consideran referentes auténticas de la religión. Por eso, no hay que confundir el Islam con las acciones de grupos demenciales como Boko Haram. Sus ataques no gozan de ningún apoyo en el mundo islámico y, en este caso, los secuestros dieron lugar a todo tipo de condenas. Un ejemplo fue la declaración de Al-Azhar, una de las principales instituciones religiosas de Egipto y una autoridad reconocida a nivel mundial en lo que respecta a la interpretación de las escrituras. Sus miembros emitieron un comunicado pidiendo que los terroristas liberen a las alumnas y afirmando que este tipo de accionar no se relaciona de ninguna forma con las enseñanzas del islam.
La realidad es que la conducta de Boko Haram contradice directamente las escrituras islámicas. En un video dado a conocer por el grupo, el líder declara que ya han "liberado" a las chicas, porque las convirtieron al islam. Además, muestran testimonios de dos de las alumnas secuestradas (cristianas) afirmando que fueron obligadas a cambiarse de fe. Esto se opone al ejemplo de Mahoma, una de las fuentes principales del derecho islámico, y del propio Corán. Al llegar a Medina, Mahoma creó una constitución islámica, pero respetuosa de las religiones preexistentes. Y el mismo Corán define con claridad la cuestión en un verso: "Nada de imposición en cuanto a religión."
Elige las instituciones educativas como objetivos porque considera que sus enseñanzas están plagadas de corrupción occidental
Así como esta no es una cuestión del islam, tampoco es una cuestión de género. En lo que hace al islam, Mahoma y el Corán, para su época, expandieron los derechos otorgados a las mujeres. En este caso específico, la abducción de las niñas tampoco es simplemente parte de una campaña antieducación femenina. En febrero, Boko Haram organizó un golpe en una escuela de otra ciudad, en el que separó alumnos de alumnas. Las mujeres fueron liberadas y se les ordenó renunciar a la educación secular y a casarse. De los varones, 59 fueron asesinados, algunos de ellos quemados vivos. Sólo en el último año, el grupo realizó 50 ataques a escuelas. Indistintamente, niños y niñas son víctimas del accionar de Boko Haram, que elige las instituciones educativas como objetivos porque, como vimos, considera que sus enseñanzas están plagadas de corrupción occidental.
Boko Haram es un grupo que pretende obtener el poder mediante la violencia y establecer un Estado estrictamente islámico basado en prácticas y fundamentos que están en oposición a casi todo el mundo musulmán. Se calcula que unas 4000 personas han muerto como consecuencia de su accionar en los últimos cinco años. En este contexto, el secuestro de las 300 niñas es uno entre muchos actos terroristas de este grupo, y el papel del islam y de las adolescentes secuestradas se reduce al de ser un medio para un fin: el terrorismo como herramienta para llegar al poder.