Libertad sindical es federalización convencional

El presidente Javier Milei en su DNU incorporó reformas laborales; respetar su proyecto de gobierno es respetar la democracia y garantizar la institucionalidad del país, estemos o no de acuerdo, es un reconocimiento a la voluntad popular de quienes lo eligieron como primer mandatario y también a la propia investidura presidencial. Un respeto a la hora de debatir modificaciones que deberá ser mutuo para terminar de garantizar nuestra democracia, como así también el sindicalismo argentino tiene la obligación moral en la defensa de los derechos de los trabajadores presentando propuestas, no amenazas.

La ampliación del período de pruebas de 3 meses a 8 meses, como así también la modificación de la base de cálculo de las indemnizaciones por una de menor valor, más allá de la acción judicial que las dejó momentáneamente sin efecto, marcó su posicionamiento. Ahora… a la libertad que pregona el Presidente la debería hacer realidad federalizando las discusiones convencionales por provincia o región; sindicatos cordobeses llevando adelante paritarias con el empresariado cordobés, y así replicarlo en todo el país. Cada actividad, como cada provincia, tiene idiosincrasias distintas que se verían reflejadas en esas CCT (convenciones colectivas de trabajo) provinciales o regionales.

Una Argentina inmersa en una espiral inflacionaria y un alto nivel de trabajo informal no da respiro para vislumbrar cómo sería crecer y generar empleo en normalidad, pero es un deber dirigencial adelantarnos a los tiempos para preparar la reinserción laboral y comenzar a trabajar preventivamente en la creación de nuevas herramientas tecnológicas -reconversión laboral- que serán utilizadas por los trabajadores en los empleos que llegan de la mano de la IA. Pero desde una reforma laboral política partidaria es inviable: la ley de Home office promulagada por el Congreso lo demostró: resultó inútil desde lo práctico. Volviendo al DNU, la rotación laboral impuesta por los propios trabajadores hace ver a la ampliación de 3 a 8 meses como una acción de desconfianza del gobierno más que un condicionante temporal para exigir una indemnización, una medida de impacto en los 90, no para estos tiempos.

Indemnización por Renuncia o Cese Laboral (Ley 22.250 - Mejorada). El otro punto de DNU tomado como controvertido es la indemnización, la que se ha tornado desde hace bastante tiempo para el sector empresario pyme en un escollo insalvable y que perjudica directamente a los trabajadores desocupados a la hora de conseguir empleo, como para aquellos con antigüedad, a quienes les genera una incertidumbre mayor frente a algunos empleadores que no pueden o no quieren afrontar indemnizaciones llevando a la quiebra forzada a sus empresas; en donde los años de servicios , capital del trabajador, desaparecen en el proceso de la quiebra.

Queremos comenzar conceptualizando esta posición: la empresa está compuesta de capital y trabajo, los dividendos gananciales anuales pagan a los accionistas y patrimonializan a la mano de obra. Esta capitalización del trabajo no representa una regalía ni un reconocimiento de ninguna índole para con el trabajador; es la cuantificación de su trabajo realizado a lo largo de los años de producción en la empresa, estamos frente a un derecho que debe ser regulado pensando también en el empleado responsable.

No buscamos ni podemos modificar lo hoy normado por la LCT (Ley de Contrato de Trabajo) en lo que respecta a montos. Si pretendemos para poder hablar de virtuosidad y justicia, evaluar la situación de los trabajadores que pretenden terminar su relación laboral; a ellos le asiste también el derecho hoy denegado de llevarse su patrimonialización, la que se llama según esta legislación vigente: indemnización. Ajustándonos a la terminología utilizada en la LCT intentamos normar un aspecto no ponderado por la ley, el pago de la “indemnización por renuncia” y por jubilación.

Ahora … ¿cómo instrumentar este nuevo derecho y evitarle otra pesada carga a las pymes? En este caso deberemos poner en marcha el sistema indemnizatorio denominado cese laboral. Aquí estaríamos conjugando el ganar – ganar de licuar el pasivo contingente de las empresas y otorgarle desde este fondo la indemnización por renuncia o jubilación a los trabajadores.Lo diferencial de este proyecto: la recaudación del cese conformará un fondo de inversiones administrado por (empresas-trabajadores y regulado por el Estado) el que será reinsertado al mercado en calidad de préstamo a las empresas aportantes, debiendo garantizarse la liquidez frente a un distracto laboral.

Esta etapa exploratoria nos debe llevar a la búsqueda de una posición clara y de equilibrio entre los intereses de empleados y empleadores para comenzar a legislar el sector y convencionarlo desde el interior del país y no en forma excluyente desde Buenos Aires. Es indispensable para transformar, federalizar. Necesitamos una transformación en las relaciones laborales pero salidas desde los propios CCT por sector y no desde una reforma laboral genérica.

Estos son algunos de los marcos referenciales de los próximos CCT , darle previsibilidad y simpleza procedimental, dejando de lado cualquier tipo de interpretación que no se ajuste a un ganar-ganar, es el ordenamiento que se viene y necesitamos en materia de relaciones laborales.

El nuevo paradigma sindical es ser también garante de le seguridad jurídica y trabajar desde la reconversión laboral para generar empleabilidad en un nuevo mundo del trabajo que se abre con la tecnología (inteligencia artificial).

El cambio de paradigma laboral implica también el cambio de cabeza empresarial, los salarios no son costos… sino una compensación mensual junto al crecimiento de la empresa, internalizando también que los dividendos resultantes (ganancias) deberían, sí, comenzar a reconocer a ese actor principal no contemplado, y que el viejo esquema laboral vislumbró desde la Constitución nacional cuando habló de distribución de las ganancias con los trabajadores. Son muchas las posiciones que deberemos construir pero la frase clave para ese crecimiento compartido es …”consenso y federalización en las decisiones”

Nos hay más atajos en la reconstrucción de la Argentina de la “posverdad”, asumimos equilibrar las cargas y salir con esfuerzo y crecimiento sostenido federalizado o nos quedamos durante cuatro años más en el relato justificante de que los errores fueron del gobierno anterior y que la única salida para los jóvenes es Ezeiza.

Secretario General Uecara del interior. Presidente – Partido Laborista Argentin