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Vaporetti sólo para veneciano
Revolución en Canal Grande. En poco tiempo más llegará una línea de vaporetto reservada exclusivamente a los residentes, hartos del asalto cotidiano de hordas de turistas con valijas, trolleys, cámaras, mochilas y hamburguesa en mano. Claro, tras superar el techo de 20 millones de visitantes por año, la capacidad de los medios de transporte público, siempre repletos, ya no daba abasto en Venecia. Y quienes viven y trabajan en la fascinante ciudad de las góndolas ya no soportaban viajar apretados como sardinas, entre empujones e imprecaciones. Desde hace años reclamaban a gritos una línea de navegación propia y prohibida a los turistas sobre el principal Canal Grande, desde Piazzale Roma (donde está la estación de trenes), hasta Piazza San Marco.
Con una operación que costará tres millones y medio de euros (más el dinero necesario para la compra de cinco vaporetti ), la revolución estallará el próximo 21 de enero, en coincidencia con el famoso Carnaval de Venecia. Entonces, comenzará a surcar las aguas la línea tres, exclusiva para residentes y con una frecuencia de diez minutos entre uno y otro.
Pero esto no es todo. Los venecianos no sólo tendrán "su" vaporetto . Para evitar colas, también tendrán ingresos diferenciados y muelles exclusivos. "Va a ser mejor que el subte de Milán y creo que los venecianos deben estar satisfechos", dijo el alcalde de Venecia, el filósofo Massimo Cacciari, que como asiduo usuario de los vaporetti conoce bien las molestias que sufren los residentes.
Por Elisabetta Piqué
