Cavallo: la Alianza hizo caer a De la Rúa
Defendió al ex presidente al decir que actuó con patriotismo y sostuvo que no se siente el único responsable de la crisis
Exactamente una semana después de la protesta nacional que aceleró su renuncia al frente del Ministerio de Economía, Domingo Cavallo se ve como ajeno al estallido social que terminó con el gobierno de Fernando de la Rúa. Como en los tiempos en que era funcionario, el ex ministro no deja de buscar enemigos y aliados circunstanciales a la hora del análisis.
"La caída del gobierno del (ex) presidente De la Rúa no fue empujada para nada por el peronismo ni por las fuerzas provinciales, ni mucho menos por Acción por la República. Fue impulsada por la Alianza", dispara Cavallo desde el living de su departamento de la Capital durante una entrevista con LA NACION.
El mensaje político de uno de los funcionarios más criticados del anterior gobierno es claro: emitir una voz conciliadora hacia el presidente Adolfo Rodríguez Saá, apoyar -con algunas reservas- el plan económico encarado por el peronismo, defender la actitud "patriótica" de De la Rúa y atacar a radicales y frepasistas por igual.
Al hablar de su persona, dice: "Tengo responsabilidades en todo lo que ocurrió como la tienen todos los dirigentes políticos". Inmediatamente el ex ministro evita hablar de su futuro político y continúa dando recetas económicas para salir de la crisis.
-¿Cómo fueron las últimas horas como ministro?
-Muy sencillo: el miércoles trabajé como de costumbre. Cuando a la noche vi que toda la gente pedía con cacerolazos mi renuncia llamé al Presidente para decirle que tenía mi renuncia a su disposición. Pero él me dijo que esperara hasta el día siguiente y ese día me dijo que dados los acontecimientos aceptaba mi renuncia. Como había muchos disturbios llevé a mi familia a un lugar de la provincia de Buenos Aires y el viernes fuimos al Sur a pasar la Navidad.
-¿No fue De la Rúa quien pidió su renuncia?
-No, cuando vi que la gente pedía mi renuncia, para calmar la situación preferí renunciar.
-¿Y por qué cree que a las pocas horas cayó todo el gobierno?
-Prefiero no hacer evaluaciones políticas. La historia se encargará de evaluar. A mí lo que me preocupaba y me sigue preocupando es la angustia de los argentinos. Por lo tanto, como lo hice cuando fui ministro, seguiré aportando soluciones. Ayudaré a que se encuentren soluciones para sacar a la Argentina de la crisis.
-Sin embargo, la protesta social apuntó en gran medida hacia su persona.
-La gente protestó contra una situación calamitosa que esta viviendo la Argentina y la protesta se basó en el sufrimiento de la gente, que es perfectamente entendible. Yo era ministro de Economía y los sufrimientos de tipo económico los personalizaron en mí.
-¿No se siente responsable por todo lo que ocurrió?
-Todos los dirigentes tenemos que sentirnos responsables.
-¿Es decir que no hace una autocrítica de su gestión?
-No creo que las cosas haya que analizarlas así. Sigo pensando en cosas que se puedan hacer para solucionar la situación. Lo principal es que la gente mantenga el valor y la plena predisposición de sus ahorros. El anuncio de Rodríguez Saá de que se va a mantener la convertibilidad es muy positivo. Y la nueva moneda es un perfeccionamiento de los Lecop, que servirán para nuevas transacciones.
-¿Por qué el FMI le restó apoyo?
-El FMI quería un presupuesto aprobado. Ojalá el gobierno de Rodríguez Saá lo logre de inmediato. Los gobernadores y el peronismo estaban dispuestos a apoyar el presupuesto con algunas variantes. Pero quedó claro que los partidos de la Alianza no le daban apoyo a De la Rúa y mucho menos a mí. Por lo tanto, la caída del gobierno no fue empujada para nada por el peronismo ni por las fuerzas provinciales ni mucho menos por Acción por la Republica. Fue impulsada por la Alianza y los partidos que llevaron al presidente al gobierno. No sé lo que buscaban ellos (los aliancistas), quizá se sintieron defraudados por las políticas que aplicó De la Rúa.
-¿Cree que la imagen dubitativa de De la Rúa influenció en ello?
-De la Rúa actuó con total patriotismo y con las mejores intenciones para su país. Le tocó un período muy dificil. Pero acá creo que perdemos el tiempo si buscamos qué porcentaje de culpa tiene cada uno.
-¿Su futuro político está terminado?
-Lo que me interesa es el futuro de la Argentina. Cuando uno se dedica a la política con la entrega que yo dediqué no lo hace por ambiciones personales sino por vocación de servicio.