El debate por las PASO: Juntos por el Cambio pedirá más garantías y postergó una definición hasta resolver sus diferencias internas

Los líderes de Juntos por el Cambio no lograron saldar sus diferencias internas y postergaron para los próximos días una definición sobre la oferta del Gobierno para postergar las elecciones legislativas de este año. Tras una reunión de la mesa nacional del espacio opositor, el ala dura de la coalición insiste en reclamar garantías en la ley para evitar que el oficialismo, ya avanzado el cronograma electoral, suspenda las primarias –como quieren varios gobernadores del PJ- o bien las superponga con las elecciones generales de octubre, dos alternativas que Juntos por el Cambio rechaza de manera tajante.

“Debatimos la cuestión y quedamos en seguir conversando. Queremos reaseguros para evitar posibles maniobras del Gobierno”, indicaron voceros de la coalición tras la reunión. Salvo el expresidente Mauricio Macri, todos dieron el presente: los presidentes de la UCR, Alfredo Cornejo; de Pro, Patricia Bullrich y de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro; los jefes legislativos del Senado Luis Naidenoff (UCR) y Humberto Schiavonni (Pro), como Martín Lousteau (UCR) y los diputados Mario Negri (UCR), Cristian Ritondo (Pro) y Juan Manuel López (Coalición Cívica). También participaron los gobernadores Gerardo Morales (Jujuy) y Rodolfo Suárez (Mendoza).

En rigor, los participantes dedicaron buena parte del encuentro a cuestionar la la gestión sanitaria del Gobierno ante la agudización de la pandemia y el aumento vertiginoso de casos en los últimos días. En las próximas horas se conocerá un comunicado de Juntos por el Cambio al respecto.

“El Gobierno pretende que sean las provincias las que impongan las restricciones y los cierres de las actividades para coparticipar el costo político de estas medidas. Nosotros creemos que es el Poder Ejecutivo el responsable de dar el marco general de las restricciones, no los gobiernos locales”, coincidieron.

“La cuestión electoral puede esperar”

Respecto de una eventual postergación de las PASO, los opositores acordaron no apurar una definición respecto del borrador que les acercó la semana pasada el ministro del Interior Eduardo “Wado” De Pedro. “La cuestión electoral no está entre las preocupaciones de la gente. Puede esperar”, sostuvieron.

En el escrito, el Gobierno formalizó su intención de diferir por un mes las elecciones primarias –que están previstas para el 8 de agosto– se celebrarían el 12 de setiembre, mientras que las generales –fijadas para el 24 de octubre– se pasarían al 14 de noviembre. Justificó la postergación en la agudización de la pandemia y en el aumento de casos enfermedades respiratorias que tradicionalmente se registran durante la estación invernal.

El sector moderado de Juntos por el Cambio es proclive a aceptar la oferta; allí se enrolan la Coalición Cívica y algunos dirigentes de la UCR. “En pleno pico pandémico no hay argumentos para rechazar el corrimiento de las fechas. Además, se acortarían mucho los tiempos –casi siete semanas- de campaña electoral, en este contexto eso es beneficioso”, sostiene el diputado López.

No piensan lo mismo en el sector más duro de la coalición. “Queremos garantías de que el Gobierno no va a alterar nuevamente el calendario electoral. Nada garantiza de que la situación sanitaria va a mejorar en setiembre. Al oficialismo le conviene ganar tiempo para llegar mejor parado a las elecciones en materia sanitaria y económica”, aducen.