El Gobierno admite que la euforia por la Selección tendrá “impacto corto”, pero lo ayudará a pasar diciembre

En “clima Mundial”, el Gobierno mostró hoy una menor actividad que la habitual. Solo cuatro de los 18 ministerios nacionales tuvieron actividad pública durante esta jornada, en la que el seleccionado argentino de fútbol jugó la semifinal en Qatar 2022. Las actividades fueron por la mañana, algunas horas antes de que el conjunto dirigido por Lionel Scaloni derrotara 3 a 0 a Croacia y consiguiera un boleto a la gran final del certamen.

El presidente Alberto Fernández trabajó desde Olivos, donde se reunió con Jack Rosen, presidente del Congreso Judío Americano, quien previamente el lunes había visitado a Sergio Massa en el ministerio de Economía.

Luego de eso, Fernández conservó su cábala de ver el partido en Olivos, junto a la primera dama Fabiola Yáñez y el pequeño hijo de ambos, Francisco. “Mantiene sus cábalas como cualquier otro argentino”, recalcó un funcionario en línea con lo que buscaron transmitir en el Gobierno, desde donde apuntaron que el interés por el Mundial está en sintonía “con lo que pasa en el resto de la sociedad”.

Tras el pase a la final del seleccionado local, Fernández usó su cuenta de Twitter para felicitar al conjunto local. “Estos jugadores, este cuerpo técnico y toda la delegación, han hecho una Copa del Mundo increíble poniendo a la Argentina en lo más alto. Nos demostraron que el camino a la gloria siempre es en equipo. El domingo, más que nunca y con toda la ilusión, ¡vamos Argentina!”, posteó Fernández.

El clima social

El clima general en el Gobierno fue cambiando en los últimos días y hoy, tras el encuentro ante Croacia todo era alegría. Si bien reconocían que el impacto sobre el humor social del seleccionado tiene un “tiempo limitado”, convenían en que permite “tirar hasta fin de año” y eso “en un mes como diciembre es un montón”, completaban. Al tiempo que relativizan el impacto que eso puede tener a largo plazo. “No es que impacta en las urnas, ni de casualidad, pero para lo inmediato está bien”.

En las horas post triunfo estaban también quienes “veían al fin una buena”, como resumían fuentes consultadas por este diario. “Después de que nos tocara gobernar con todas en contra, esto es un mimo”, explicaban los voceros oficiales.

Las únicas cuatro carteras que comunicaron actividad hoy fueron la de Ciencia, Tecnología e Innovación, que junto a la de Defensa comunicaron la compra de una “súpercomputadora”; la de Cultura, cuyo titular Tristán Bauer participó de la Asamblea del Consejo Federal de Cultura; y la de Mujeres, Género y Diversidad, a cargo de Ayelén Mazzina, quien encabezó la III sesión del Consejo Federal, que reunió a autoridades del área en Salta. La otra actividad comunicada hoy en la agenda que distribuye Presidencia estuvo compuesta por el trabajo de la Agencia Nacional de Discapacidad.

Algo similar había sucedido el miércoles pasado, cuando se jugó el partido contra Polonia, en el que la Argentina jugaba su suerte para sobrevivir a la primera etapa. El primero de los partidos fue a primera hora de la mañana y luego hubo encuentros en dos sábados y el último, el viernes feriado. Fue el sábado del triunfo contra México que Fernández decidió mantener en adelante como cábala lo que había hecho durante ese partido. Entre quienes no informaron actividad hoy también está la jefatura de Gabinete, a cargo del tucumano Juan Luis Manzur, acostumbrado a un perfil más activo.

Por cuerda paralela, el ministro Massa tuvo dos actividades en el Palacio de Hacienda, la segunda junto al secretario de Comercio, Matías Tombolini, con quien firmaron “un acuerdo con las principales proveedoras de insumos industriales para la producción de alimentos y bienes de consumo masivo, por el cual las empresas no podrán modificar sus precios por encima del 3,9% en promedio respecto del mes de diciembre”.

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