Empresarios, entre el alivio y la desazón por la falta de anuncios

El largo discurso que pronunció Cristina Kirchner ayer en la Asamblea Legislativa fue recibido por los empresarios con una combinación de alivio por la ausencia de medidas contra el sector privado y desazón ante la falta de reconocimiento de los problemas que enfrenta la economía, como la inflación y la caída en el nivel de actividad.

En los últimos días se había especulado con la posibilidad de que el discurso presidencial incluyera cambios en el régimen impositivo y laboral, y al menos en el campo de la economía, la falta de grandes anuncios -más allá de la estatización de los trenes- terminó siendo leída como una buena noticia por parte de algunos empresarios que temían encontrarse con una medida concreta contra el sector.

"La verdad es que con Cristina siempre estamos preparados para lo peor, y por lo menos esta vez no tuvimos nada que lamentar", se sinceró el presidente de una importante cámara empresarial.

Los hombres de negocios señalaron como un dato positivo el tono menos belicoso del discurso presidencial.

"Durante por lo menos dos tercios de su discurso, la Presidenta tuvo un tono muy alejado de la confrontación con los partidos y los sectores de la oposición, lo que significa algo para destacar", sostuvo Carlos de la Vega, presidente de la Cámara Argentina de Comercio.

De la Vega además rescató la continuidad del plan Ahora 12 y coincidió con la Presidenta a la hora de destacar el papel que tienen las cuotas para evitar un deterioro más pronunciado del consumo. "Se trata de un aporte muy positivo para el consumo, y por eso ya le solicitamos al Gobierno su continuidad", señaló el dirigente empresarial.

Desde la Unión Industrial Argentina (UIA), José Urtubey, uno de los vicepresidentes de la entidad, precisó que el punto más alto del discurso presidencial en materia económica pasó por la defensa del proceso de desendeudamiento. "Es importante resaltar que la relación deuda/PBI es la más baja de la historia argentina y una de las menores a nivel mundial, pero sin perder de vista que el desafío del próximo gobierno debe ser impulsar un mayor federalismo de la economía", señaló el dirigente salteño.

Urtubey también se mostró a favor del proyecto de estatización de los ferrocarriles, que enviará el Poder Ejecutivo al Congreso. "Cualquier medida que impulse la conexión ferroviaria es positiva, y por la experiencia que conozco de cerca, que es la del Belgrano Cargas, las concesiones privadas en materia ferroviaria tuvieron un papel desastroso", señaló.

Preocupación por China

Una mirada mucho más crítica es la del secretario de la UIA y diputado nacional (Frente Renovador) José Ignacio de Mendiguren. "Cuando no se reconocen los problemas es muy difícil hacer un buen diagnóstico. Y en el discurso presidencial lo que más nos llamó la atención fue que no hubiera menciones a problemas muy concretos que enfrenta el país, como la inflación o la inseguridad", señaló De Mendiguren.

El dirigente empresarial además volvió a reiterar sus críticas al acuerdo que impulsa el Gobierno con China y que ayer fue enfáticamente defendido por la Presidenta.

"Nadie duda de que hay que negociar con China, pero lo que hay que hacer es una negociación equilibrada. Acá el problema es que la Argentina está haciendo una serie de concesiones a los chinos que no dio ningún otro país de Sudamérica", sostuvo De Mendiguren.

La idea de que se trató de un discurso de balance y despedida fue destacada por el economista Carlos Melconian. "Que no haya habido grandes anuncios es una señal muy clara de que se trató de un discurso brillante de despedida, en el que Cristina dejó bien marcado que busca consolidar su núcleo duro y un posicionamiento como la futura líder de la oposición", señaló el economista, que tras escuchar a la Presidenta no dudó en considerar que "la primera interesada en no ganar las próximas elecciones es ella", sostuvo.

El economista Orlando Ferreres también coincidió con la idea de que se trató de un discurso de despedida. "Más allá de los trenes, no hubo ninguna medida que afecte a la situación económica, pese a que en las últimas horas se había hablado mucho, lo que deja en claro que la Presidenta está pensando en su despedida", explicó el economista.ß