Jujuy: renunció el gobernador

SAN SALVADOR DE JUJUY.- El gobernador Carlos Ferraro (PJ) renunció anoche a su cargo luego de una reunión que mantuvo en su despacho con diputados oficialistas de extrema confianza y de hablar telefónicamente con el ministro del Interior, Carlos Corach. Se espera que la Legislatura se reúna hoy para tratar su renuncia. En caso de ser aceptada, el diputado peronista Eduardo Fellner podría asumir en su lugar.

Momentos después, un grupo de manifestantes apedreó al gobernador y a su esposa cuando éstos abandonaban la sede del Poder Ejecutivo provincial por una puerta lateral y fueron reconocidos. Ferraro viajaba anoche a la Capital Federal.

El desenlace de la crisis institucional que vive esta provincia se estimaba inminente desde hace varias semanas. Las razones que empujaron al mandatario peronista a tomar la decisión de renunciar fueron, entre otras, un pedido de juicio político que presentó la Alianza y el justicialismo disidente en la Legislatura y una movilización preparada por el Frente de Gremios Estatales, que hoy iba a solicitar la destitución de Ferraro en la Legislatura.

La situación del gobernador se vio agravada por tres causas penales en su contra por presuntos hechos de corrupción y la toma de distancia de las cámaras empresariales. Estas alertaron sobre la inestabilidad institucional e instaron a los dirigentes políticos a que "dejen de lado las apetencias personales y piensen en la provincia y en la fractura del PJ".

Falta de apoyo

Sin embargo, el episodio que finalmente habría provocado su renuncia fue la falta de apoyo del ministro de Economía, Roque Fernández, para instrumentar una ayuda financiera extraordinaria. El Estado provincial debe a los empleados públicos parte del sueldo de septiembre y los salarios del mes último.

Ferraro, que antes de llegar al Poder Ejecutivo fue vicegobernador, se hizo cargo del gobierno el 24 de febrero de 1996 por el fallecimiento del gobernador Guillermo Eugenio Snopek. El mandatario murió en un accidente automovilístico en la localidad de Yala.

En el corto tiempo que duró su mandato, Ferraro no supo pilotar los conflictos internos del justicialismo ni tampoco equilibrar el déficit de la caja de la administración.

Con su renuncia, Ferraro es el séptimo gobernador que tiene la provincia desde 1990, cuando Ricardo de Aparici tuvo que renunciar por la presión del Frente de Gremios Estatales, liderado, también entonces, por los sindicalistas Carlos "Perro" Santillán (municipales) y Fernando Acosta (ATE).

Incidentes

Apenas se conoció la renuncia del gobernador, un grupo de empleados estatales encabezados por Santillán se reunió frente a la Legislatura y la Casa de Gobierno para festejar la decisión. Los manifestantes renovaron sus demandas en favor del cobro de los haberes atrasados.

El festejo terminó con incidentes, ya que los estatales combativos rompieron varios automóviles y algunos vidrios de ventanas. "Creo que esto es lo que esperaba el pueblo, pero queremos que ese delincuente vaya preso, que vaya en "cana", eso el lo que se merece", vociferó Santillán.

Luego de que Ferraro abandonó la Casa de Gobierno, los manifestantes rompieron los vidrios del negocio del suegro del gobernador William Haquin, que está procesado por presuntos hechos de corrupción.