Ley de Bases: Villarruel, Francos y Posse se reunieron con jefes de bloque del Senado para explorar acuerdos

Para anticiparse a todos los frentes en el Congreso, los funcionarios de Javier Milei se reunieron esta mañana en la Casa Rosada con los jefes de los bloques no peronistas en el Senado. El objetivo del Gobierno fue comenzar a allanar el camino para la ley de Bases y el paquete fiscal, que comenzarán a debatirse la semana próxima en Diputados y que -de acuerdo al cronograma tentativo oficial- llegaría a la cámara Alta la primera semana de mayo.

El Gobierno confía en que ya logró construir consensos en torno a los proyectos oficiales en la Cámara baja, tras varias semanas de idas y venidas con los jefes de las bancadas “amigables” y con buena parte de los gobernadores. El terreno en la Cámara alta, no obstante, está menos explorado para la Casa Rosada. Si Milei pretende que las leyes vean la luz antes del Pacto de Mayo, proyectado para el Día de la Patria, el reloj empieza a correr.

Esta mañana a la Casa Rosada arribaron el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, y los jefes de bloque Ezequiel Atauche (La Libertad Avanza), Luis Juez (Pro), Juan Carlos Romero (Cambio Federal) y Eduardo Vischi (UCR). Los recibieron la vicepresidenta Victoria Villarruel; el minstro del Interior, Guillermo Francos; el jefe de Gabinete, Nicolás Posse; el vicejefe de Gabinete, José Rolandi y el secretario de Interior, Lisandro Catalán.

Durante el encuentro, Rolandi -que es el articulador técnico del proyecto- repasó cada uno de los temas abarcados por las dos iniciativas. Según pudo saber LA NACION, los senadores hicieron algunas preguntas pero no presentaron grandes objeciones. “Fue una charla menos apasionada que la que hubo con los diputados. Se intuye que habrá apoyo de los bloques”, dijo un colaborador oficial al tanto de la reunión.

Las conversaciones no llegaron aún a la instancia del poroteo fino. Pero el Gobierno necesita afinar el contador de los aliados para tener tranquilidad en el Senado, donde LLA tiene solo 7 senadores propios. Milei necesita obligatoriamente el favor los bloques no peronistas para conseguir la sanción de las leyes, ya que Unión por la Patria -que, se descarta, rechazará las iniciativas- suma 33 escaños. Así, la mayoría es mucho más escurridiza que en Diputados.

Además, aún sobrevuela el fantasma de la sesión en la que se impuso el rechazo al decreto de necesidad y urgencia (DNU) 70/2023. En esa oportunidad, al peronismo se sumaron los votos de algunos senadores que responden a movimientos provinciales más algunos legisladores radicales. Ello fue suficiente para asestarle un revés al Gobierno.

“Se mencionó que hay que trabajar fuerte para que estén los senadores (por el quórum) y para que estén los votos”, dijo un colaborador en la Casa Rosada, en donde ya evalúan cómo asegurar 37 votos o, eventuamente, 36 votos que requieran el desempate de Villarruel.

En el caso del Senado, en tanto, todavía se desconoce el impacto que pueden tener los gobernadores patagónicos, que vienen exhibiendo mayores disidencias en todas las conversaciones. El día que se votó el DNU, por caso, votaron en contra del decreto dos senadores de Santa Cruz que responden al gobernador Claudio Vidal y una senadora de Chubut cercana a Ignacio Torres (Chubut).

Además, el Gobierno debe seguir de cerca el caso de Córdoba, cuyo gobernador, Martín Llaryora tuvo distintos vaivenes en el vínculo con la Casa Rosada. En las últimas semanas, Francos tuvo diálogo telefónico con el mandatario de la provincia mediterránea. Con él el Gobierno no solo tiene que conversar sobre el paquete de leyes sino también comenzar ajustar los pormenores del Pacto de Mayo, que se celebraría en la capital provincial.

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