Los diputados de Roberto Lavagna y el socialismo anticiparon su rechazo a la nueva fórmula de movilidad jubilatoria

El proyecto de ley de movilidad jubilatoria, que cuenta con media sanción del Senado, no tendrá un tránsito sencillo en la Cámara de Diputados. Cinco diputados del interbloque Federal anticiparon que no apoyarán la iniciativa del oficialismo porque, pese a las reformas incorporadas, "sigue perjudicando a los jubilados y pensionados".

"La propuesta del Frente de Todos y de Alberto Fernández no resuelve el problema del achatamiento y de la pérdida de poder adquisitivo (de los jubilados)", aseveraron en un comunicado los diputados lavagnistas de Consenso Federal Graciela Camaño, Jorge Sarghini y Alejandro "Topo" Rodríguez, como así también los diputados Enrique Estévez, del Partido Socialista, y Luis Contigiani, del Frente Progresista Cívico y Social.

La iniciativa comenzará a discutirse el lunes próximo en el plenario de las comisiones de Presupuesto y de Previsión Social. El oficialismo, que no tiene mayoría propia, prevé aprobarlo en el recinto el 30 de este mes: para ello, necesitará del aporte de al menos 12 aliados. El principal bloque opositor, Juntos por el Cambio, ya anticipó su rechazo.

En el comunicado, los cinco diputados del interbloque Federal no solo cuestionaron la política previsional del Gobierno; también criticaron la fórmula de movilidad jubilatoria que se aplicó durante los últimos dos años de gobierno del expresidente Mauricio Macri, que actualizaba los haberes según la inflación. Al asumir su mandato, Fernández decidió suspender aquella fórmula con el compromiso de que enviaría al Congreso una nueva propuesta antes de fin de año.

"Los jubilados no pueden seguir siendo la variable de ajuste de los errores en que incurren los sucesivos gobiernos –aseveraron los diputados del interbloque Federal–. El gobierno de Cambiemos los perjudicó seriamente al cambiarles el sistema, con una fórmula de movilidad jubilatoria solo defendible en una economía que fracasa: se estanca o decrece con alta inflación. También fueron perjudicados por la dolarización de las tarifas y su duro impacto en el costo de vida. Ahora, la propuesta del Frente de Todos y de Alberto Fernández no resuelve el problema del achatamiento y de la pérdida de poder adquisitivo."

Los legisladores advirtieron que la nueva propuesta del oficialismo sigue sin resolver el problema de fondo: el 50% de argentinos que trabajan en la informalidad y, por lo tanto, no aportan al sistema previsional.

"El sistema está quebrado y es indispensable aumentar la cantidad de aportantes, lo que se puede lograr incorporando al 50% de los trabajadores privados que hoy están en la informalidad y creando trabajo. Ese es el gran mandato social que debe cumplir el Gobierno", aseveraron.

La nueva fórmula aprobada la semana pasada por el Senado es similar a la que rigió durante el gobierno de Cristina Kirchner: se aplicará de manera trimestral (en la versión original del Poder Ejecutivo era semestral) y excluye a la inflación como factor para determinar la actualización de las jubilaciones. Estará compuesta en partes iguales por la recaudación de los impuestos destinados a financiar a la Anses y por el indicador que arroje el resultado más alto entre la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) y el índice de evolución salarial que elabora el Indec.

Asimismo, el kirchnerismo en el Senado decidió incorporar el 5% de aumento a los jubilados otorgado por el Gobierno en diciembre, que en el proyecto de Economía era tomado a cuenta de la primera actualización.

Rechazo de Juntos por el Cambio

Por otra parte, los diputados de Juntos por el Cambio que integran las comisiones de Presupuesto y de Previsión Social se reunieron ayer para analizar las incorporaciones que el Senado incluyó en el texto aprobado la semana pasada.

"Perjudica a los jubilados una vez más –advirtieron–. La eliminación de la variable de inflación (IPC) de la fórmula quita la garantía a los jubilados de preservar el poder adquisitivo de sus haberes. Esta variable es la más utilizada en el mundo para preservar el valor de los haberes, especialmente en los momentos donde la economía está en recesión, y en un país como el nuestro con altas tasas de inflación."

Los legisladores opositores reiteraron que, durante este año, las actualizaciones jubilatorias dispuestas por decreto del Poder Ejecutivo redundaron en una fuerte pérdida en el nivel adquisitivo del sector previsional.

"Los jubilados perdieron entre $1000 y $18.000 pesos por los aumentos otorgados por decreto. Hay jubilados que han llegado a dejar de percibir hasta 140 mil pesos en el año como resultado de las medidas del presidente Alberto Fernández", asestaron los legisladores de Juntos por el Cambio, que estimaron que, con este ajuste, el Estado "ahorró" 100 mil millones de pesos durante este año.