Los edecanes favorecieron a De la Rúa

El ex presidente Fernando de la Rúa obtuvo un triunfo parcial en la investigación por el presunto pago de los sobornos a senadores nacionales para destrabar la sanción de la ley de reforma laboral, en abril de 2000.

El ex jefe de la Casa Militar Julio Hang durante su gobierno y sus ex edecanes Carlos Castro Madero y Mario Troncoso rectificaron los dichos del presunto arrepentido Mario Pontaquarto y afirmaron que jamás lo vieron en la Casa Rosada.

Pontaquarto había detallado en sus sucesivas declaraciones indagatorias que De la Rúa habría coordinado una reunión en su despacho de la Casa Rosada con los entonces senadores José Genoud y Augusto Alasino, entre otros, para ordenar el pago de los presuntos sobornos.

Hang declaró, sin embargo, que "nunca vio" a Pontaquarto en la Casa Rosada, ni recordó una reunión entre De la Rúa, esos senadores, el entonces ministro de Trabajo Alberto Flamarique y Pontaquarto, detallaron a LA NACION fuentes abocadas a la investigación.

"Por los medios"

Hang dijo que sólo conocía a Pontaquarto "por los medios" y coincidió con los edecanes al describir la distribución de los muebles en el despacho presidencial, al decir que había "un escritorio que estaba ubicado paralelo a la pared", mientras que Pontaquarto señaló que el escritorio estaba "oblicuo".

Los fiscales Eduardo Freiler y Federico Delgado relativizaron, no obstante, las eventuales implicancias de las contradicciones entre Hang, Castro Madero y Troncoso con el presunto arrepentido.

Los investigadores estiman que esas diferencias no destruyen los indicios reunidos en la causa que llevan a la conclusión de que De la Rúa no pudo estar ajeno al presunto pago de los sobornos, dijeron a LA NACION informantes del Ministerio Público.

Los fiscales confían en que el canciller Rafael Bielsa aporte nuevos indicios en ese sentido al declarar por escrito en la causa, ya que afirmó reiteradas veces ante los medios de comunicación que De la Rúa "obstruyó" su investigación como titular de la Sigen sobre el uso de fondos reservados en la SIDE.