Piden indagar a Fariña y a Elaskar y allanan "La Rosadita"
La fiscalía solicitó interrogarlos por lavar $ 20 millones; Madero Center y las oficinas de los acusados fueron requisados mientras se hacia el cacerolazo
La fiscalía pidió indagar al contador Leonardo Fariña y al financista Federico Elaskar, por supuestas operaciones de lavado de dinero por lo menos por $ 20 millones. Pero éstas no son las transferencias que confesaron por televisión haber realizado por cuenta del empresario kirchnerista Lázaro Báez, sino otras operaciones financieras que también tuvieron lugar entre 2010 y 2011. El requerimiento fiscal implica la apertura de la investigación, a cuatro días de la denuncia pública.
Anoche, a las 21, mientras se desarrollaba el cacerolazo contra el Gobierno, fueron allanadas, en el edificio Madero Center de Puerto Madero, las oficinas del séptimo piso A y B, de la financiera SGI, usada para el blanqueo, otro departamento de Elaskar, en calle Azucena Villaflor; otro domicilio cercano con oficinas y en otras oficinas de Fariña en La Plata. Intervino la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Secuestraron documentos, que se llevaron en cajas, mientras los autos que pasaban por el ya emblemático edificio de Puerto Madero, conocido como "La Rosadita" por sus vecinos ligados al poder, hacían sonar bocinas y los conductores gritaban "¡Chorros, devuelvan la plata!"
El fiscal federal Ramiro González, junto con el fiscal a cargo de la unidad antilavado, Carlos Gonella, impulsó la investigación que maneja el juez federal Sebastián Casanello. En principio, la pesquisa quedó recortada a los dos personajes visibles de la denuncia. No menciona a Lázaro Báez ni a los Kirchner. No obstante, el dictamen dice que la investigación puede ampliarse, "sin perjuicio de que a partir de la recolección de pruebas surjan nuevos imputados", dijeron a LA NACION fuentes judiciales.
El juez Casanello, a pedido de la fiscalía, pidió el programa Periodismo para Todos, de Jorge Lanata , del domingo último, donde Fariña y Elaskar reconocieron haber sacado del país por lo menos 50 millones de euros, a través de sociedades panameñas y los depositaron en Suiza. Pidió las grabaciones sin editar de las entrevistas siempre que no se viole la reserva de sus fuentes.
Además la fiscalía solicitó copias de los programas de América TV, donde ambos se desdijeron de sus denuncias. Fariña dijo haber sido ser el valijero de Báez, para llevar y traer dinero; Elaskar, que acusa a enviados de Báez de haberle sacado su financiera bajo amenazas, admitió que sacó el dinero.
Gonella, un fiscal de la agrupación filokirchnerista Justicia Legítima, fue designado por la procuradora Alejandra Gils Carbó en la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), que absorbió la antigua fiscalía antilavado que dirigía Raúl Pleé, en las antípodas de Justicia Legítima. Gonella es los ojos de la procuradora en el expediente.
Fue Gonella quien recibió de la Unidad de Investigación Financiera (UIF), a cargo de José Sbatella, cuatro reportes de operaciones sospechosas (ROS) que involucraban a Fariña y a Elaskar. Sbatella, denunciado por utilizar políticamente a la UIF, tuvo estos informes desde 2010 y 2011. Sólo decidió judicializarlos luego de que el programa de Lanata salió al aire el domingo pasado.
Los reportes se refieren a operaciones de Fariña y a Elaskar por unos 20 millones de pesos. Se cuentan la adquisición de autos de alta gama por parte de Fariña, incluida una Ferrari. Pero además hay un ROS del Banco Central por una transferencia de 16 millones de pesos que involucra a SGI, otros por un poco más de $ 400.000 del Standard Bank, sobre cuentas del financista y otro por una transferencia de US$ 90.000.
Aparecen los empresarios que encargaron los giros a través del mercado electrónico. Lo que hace sospechosas las operaciones es el origen injustificado del dinero.La información está contenida en unos 20 legajos y la fiscalía ya pidió que se solicitara a la AFIP, al Banco Central, a la Inspección General de Justicia, y a los bancos, información sobre declaraciones impositivas de personas y empresas mencionadas, sus balances y sus cuentas. El juez Casanello ya firmó esos pedidos.
"Vamos a ir con pie de plomo. Este es el primer dictamen. La idea es recoger información desde atrás hacia adelante. Haciendo la genealogía de lo que ahora se denuncia para llegar al dueño de la plata", dijo una fuente judicial. Fariña no se mostró preocupado por el pedido fiscal. "Confío en la Justicia. Nunca me fui del país, me quedo y estoy a disposición."