La demanda de locales se incrementó progresivamente con la recuperación del sector textil
Emblema de las desventuras de la industria textil durante la década de los noventa, la avenida Forest, en el tramo entre Federico Lacroze y Jorge Newbery, comienza a levantarse lentamente, luego de la crisis del sector, golpeado por la importación.
La paridad del peso con el dólar y la reducción de las barreras arancelarias para las importaciones afectaron a los comercios de esta zona de Chacarita.
Algunos fabricantes cerraron sus puertas y abandonaron la profesión. Otros se quedaron para seguir fabricando u optaron por importar. Con la devaluación del peso y el repunte de la industria textil, la perspectiva hoy es otra.
Luis Fusi, socio gerente de FB Negocios Inmobiliarios, contó: "Las condiciones están dadas para que se repitan los buenos años. Ha quedado un público residual que sigue comprando camperas en Forest y va en aumento".
Explica que el valor de un local comercial se calcula de manera distinta que el de una vivienda. En locales, depende de la demanda potencial y de las posibilidades de venta, a lo que se suman la ubicación, la superficie y la exposición de la vidriera.
"En Forest, locales comunes, de 4 m por 15 m, están alrededor de 700 pesos de alquiler. En venta, el precio estimativo es de 30.000 dólares."
Fusi también recuerda la época anterior: "Forest es una avenida y un centro comercial importante que surgió a partir de una fábrica familiar, de origen checoslovaco, que se llamaba Eton y que hacían dos liquidaciones anuales. Como atraía a mucha gente, otros comerciantes comenzaron a poner locales. El producto que más se vendía era la campera y la zona se transformó en un verdadero boom comercial. Muchas casas se demolieron para construir locales. En ese momento, un local de 3,50 m por 20 m podía costar de 200.000 a 300.000 dólares de aquella época. Pero los comerciantes lo pagaban porque les servía, ya que en esta zona se vendían más camperas que en la calle Florida, la avenida Santa Fe o Cabildo. Con la importación, el comercio de camperas se dejó de concentrar exclusivamente en la avenida Forest y se abrieron otros puntos comerciales, lo que redujo el numero de clientes en estos comercios de Chacarita".
Carlos Pamboukdjian, titular de San Carlos Negocios Inmobiliarios, cree que el repunte ocurre de manera lenta, pero constante. "Hay que tener en cuenta, además, que no es lo mismo la vereda izquierda de Forest que la derecha, considerando el sentido del tránsito. La zona comprendida entre Forest, Jorge Newbery, Córdoba y Federico Lacroze ha tenido un crecimiento comercial importante, a diferencia de lo que pasa sobre la avenida Corrientes, desde Forest hasta Federico Lacroze. Se inauguró una gran cantidad de locales que venden velas, tapicería o muebles antiguos. En este momento, estamos vendiendo un local de 4 m por 17 m a 29.500 dólares. Para alquilar hay un local de 45 m2, que tiene otro tanto de sótano y 40 más de departamento en la parte superior, a 1000 pesos mensuales."
En este momento se construye una fábrica en Forest, entre Maure y Jorge Newbery, que se dedicará a la producción de ropa femenina. La reactivación de la zona, según los vecinos y comerciantes, no pasa tanto por el precio de las propiedades, sino por las expectativas del sector textil. En vacaciones de invierno hay mucha gente del interior que todavía concurre a Forest a comprar y se suman a los clientes de la ciudad.
La zona suma la ventaja que implica la proximidad de innumerables transportes, entre ellos, la línea B de subterráneos, el ferrocarril de la ex línea Urquiza y todas las líneas de colectivos que pasan por Chacarita.
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