ADN del crimen: sesenta segundos de golpes y un abrazo para festejar la locura asesina en Villa Gesell
Los estudios de ADN realizados en las prendas de los ocho imputados revelaron que el 70 % de la ropa de los agresores tenía sangre de Fernando Báez Sosa
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LA NACION
Veinte segundos después de asestar una andanada de patadas y pisotones a Fernando Báez Sosa y dejarlo tirado con la cara ensangrentada en la vereda de la calle 3, dos de los integrantes del grupo agresor volvieron sobre sus pasos, miraron hacia donde estaba el joven al que habían molido golpes y se abrazaron.
La escena fue registrada por un domo de la Municipalidad de Villa Gesell y el detalle de las imágenes figura en el acta de visualización firmada por la oficial Evelin Merlo que secuestró las grabaciones de la cámara de seguridad.
Según consta en el acta, a Fernando le pegaron durante 60 segundos. Antes de atacarlo, los ocho acusados esperaron que los policías de la Dirección Infantería asignados a la custodia de la calle 3, donde funcionan boliches y restaurantes abandonaran la zona para atender un alerta por una serie de incidentes provocados por un grupo de jóvenes que arrojaban piedras a los autos estacionados en el Paseo 102.
Merlo fue una de las testigos convocadas para la quinta audiencia del juicio oral contra los ocho acusados del homicidio doblemente agravado del joven estudiante de Derecho, ocurrido el 18 de enero de 2020, entre las 4.40 y las 5, a la salida del boliche Le Brique, en Villa Gesell.
Se consignó en el acta que a las “4.44.09, se visualiza personal policial de la Dirección de Infantería, afectado al Operativo Sol, cuando cruzan la calle 3, en sentido oeste a este, en dirección al Paseo 102″.
La oficial detalló en el documento que fue incorporado por lectura en el juicio oral que a las “4.44.50, se visualiza en la vereda Este de la calle 3 el comienzo de una revuelta de varias personas. Todos masculinos. Uno de ellos lanza golpes de puño y patadas. No se logra ver hacía qué persona u objeto. En ese momento, la cámara quedó bloqueada por los árboles de la vereda y vehículos estacionados”,
Al mismo tiempo, uno de los ocho imputados por el homicidio de Fernando, comenzaba a grabar con su teléfono celular el momento en el que comenzó el ataque que terminó, sesenta segundos después, con el joven asesinado a golpes de puño y patadas.
La secuencia corresponde a uno de los tres archivos de video hallados por los investigadores del homicidio de Fernando, en el celular de Lucas Pertossi, uno de los ocho imputados por el asesinato. Esos videos se reprodujeron en dos de las cinco audiencias del juicio oral realizadas hasta el momento.
La descripción de la mujer policía agregó que a las “4.46.14, el masculino de camisa blanca, pantalón de género claro y zapatillas blancas y muchacho que tiene remera negra, pantalón de jean y zapatillas negras, se abrazan y se retiran lugar en dirección a la avenida Buenos Aires”,
Nunca en la historia penal argentina hubo tantos registros fílmicos de un asesinato. En este caso, la Justicia contó con cuatro cámaras distintas que grabaron la agresión y que constituyeron pruebas clave para reconstruir cómo fue el ataque.
Luego, los ocho agresores doblaron por la avenida Buenos Aires y pasaron frente a un supermercado chino. La cámara de seguridad del local comercial registró el paso de los jóvenes en una grabación de 39 segundos. A los 19 segundos de iniciada la reproducción, pasó el segundo integrante del grupo atacante, que se “chupa la mano derecha”. El objetivo de esa maniobra fue quitarse la sangre del joven que había golpeado y que quedó en su mano. De nada sirvió. Los estudios de ADN realizados en las prendas de los ocho imputados revelaron que el 70 % de la ropa de los agresores tenía sangre de Fernando.
Las imágenes en el expediente
“El video del supermercado chino consiste en una grabación de 36 segundos donde se observa a un efectivo del Cuerpo de Infantería junto a dos masculinos. Uno de ellos se limpia la mano derecha en su espalda. Otro se chupa la mano derecha”, detalló la oficial Lorena Benítez en el acta que figura en el cuerpo N° 1 de la Investigación Penal Preparatoria 03/04/00349/20/00.
Benítez y Merlo estaban citadas a declarar en la audiencia de ayer, pero el representante del Ministerio Público y el abogado de los padres de Fernando desistieron de ambas testigos y las actas, en las que se describieron el abrazo de dos acusados y al escena en la que se limpiaron la sangre de la víctima, se incorporaron por lectura en el debate.
Al tomar el camino de regreso hacia la casa que habían alquilado cerca de la reserva natural de Villa Gesell, el grupo agresor pasó por el hotel Inti Huasi, situado en el cruce de Alameda y Buenos Aires.
Andrea Ranno estaba por comenzar a preparar los desayunos cuando escuchó los pasos que se aproximaban al hotel. “Estaban muy exaltados, muy contentos, contentísimos y felices”, dijo la testigo al declarar ante el Tribunal Oral N° 1 de Dolores, en la quinta audiencia del juicio oral contra los ocho acusados del homicidio de Fernando.
Según la encargada del turno noche del hotel, uno de los integrantes del grupo agresor dijo : “Le rompí toda la jeta, viste… le llené toda la jeta de sangre”.
La escena de los festejos de los acusados que describió la primera testigo que declaró ayer y la frase que escuchó a uno de los integrantes del grupo agresor coincidió con las acciones desarrolladas por los acusados en los segundos posteriores a la golpiza que le asestaron a Fernando y que habían sido registradas por las cámaras de seguridad municipales instaladas en la calle 3, en las adyacencias de Le Brique y del supermercado chino situado en la esquina de Alameda y Buenos Aires.
Hasta la cuarta audiencia del juicio oral, algunos de los testigos que declararon en el debate habían reconocido a Máximo Thomsen, Ciro, Luciano y Lucas Pertossi y Ayrton Violaz como los agresores de Fernando.
Pero ayer, en la quinta audiencia, el comisario Jorge Luis Stavrakis, identificó en uno de los videos grabados por las cámaras de seguridad mencionadas a Matías Benicelli y a Enzo Comelli como integrantes del grupo que atacó a Fernando y a su amigo Tomas D’Alessandro a la salida de “Le Brique”.
Mientras mostraban las imágenes, los ocho imputados observaron las filmaciones, que fueron reproducidas a menor velocidad y con zoom por solicitud del testigo.
Blas Cinalli fue el único de los ocho imputados, que no fue señalado por los testigos. No obstante, todavía están pendientes las declaraciones de varios peritos que podrían complicarlo.
Por este motivo, Cinalli estará pendiente de las declaraciones de los peritos, convocados para la audiencia del miércoles próximo que realizaron los estudios de ADN de los restos de sangre hallados en las prendas de vestir, calzado de los acusados y en las uñas de la víctima.
Los análisis de ADN realizados durante la etapa de instrucción concluyeron que el perfil genético de la sangre hallada debajo de las uñas de la víctima correspondía a Cinalli. En los hisopados también se habría encontrado un segundo perfil genético que correspondería a Máximo Thomsen.
Estos estudios deberán ser ratificados o ampliados por los mencionados peritos cuando declaren el miércoles próximo.
Hasta el momento, declararon todos los testigos que estuvieron en el boliche, en los momentos previos al ataque y los que presenciaron la agresión frente a Le Brique. También expusieron los policías que llegaron a la escena del crimen alertados por los gritos de la gente que estaba en la calle 3 en el momento que Fernando fue golpeado hasta ser asesinado.
Ayer, fue el turno de los testigos que estaban a la vuelta del donde mataron a Fernando y presenciaron cómo fue la huida de los acusados y la posterior detención de los imputados.
El turno de los peritos
A partir de la sexta audiencia comenzarán a declarar la médica de la ambulancia del servicio de emergencias que asistió a Fernando y que lo encontró muerto. También fue convocado el forense que realizó la autopsia y encontró las improntas uniformes en la base del maxilar y la parte superior del cuello de la víctima.
Esas marcas fueron registradas por un fotógrafo forense y las imágenes se incorporaron en el expediente. Los peritos que realizaron los estudios comparativos entre dichas improntas y las suelas de las zapatillas secuestradas en poder los acusados fueron convocados a declarar el martes y miércoles próximos.
Se trata de diez peritos que participaron en el levantamiento de las muestras de las suelas de las zapatillas y los que realizaron el análisis comparativo con las imágenes tomadas por el fotógrafo forense de las marcas encontradas en el rostro de la víctima.
Según consta en el expediente, las marcas en la cara de Fernando fueron causadas por la suela de la zapatilla de Thomsen, al pisarle la cabeza. Esas zapatillas negras son talle 40/41, muy distinto al calzado que utiliza el remero Pablo Ventura, que usa 46/47 y que había sido señalado falsamente por Thomsen, cuando, Mariano Vivas, uno de los policías que participó en la detención de los acusados, le preguntó a quién pertenecía el par de zapatillas negras, manchadas con sangre. Los estudios de ADN concluyeron que la sangre de esas zapatillas era de la víctima.
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