Quilmes: un juez y su custodio mataron a dos delincuentes que quisieron asaltarlos cuando salían de un polígono de tiro

Un juez de San Isidro y su custodio mataron en un tiroteo a dos jóvenes de 18 años e hirieron de gravedad a un adolescente de 16 que intentaron asaltarlos cuando salían de un polígono de tiro en Quilmes.

El hecho se produjo este sábado a las 18.30, cuando al menos cinco delincuentes armados que iban en un auto negro interceptaron al Renault Captur en el que viajaban el camarista Ernesto García Maañón y el policía afectado a su custodia en Cevallos, entre Castelli y Paso, junto al asentamiento El Monte.

García Maañón, de 74 años, juez de la Sala I de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro y profesor de Derecho Procesal Penal en la Universidad del Salvador, es un experimentado usuario de armas y acababa de disputar un torneo en el Tiro Federal de Quilmes, situado a cinco cuadras del lugar donde fue interceptado por los asaltantes.

Según informaron fuentes policiales y judiciales, en esas circunstancias, el juez y su custodio sacaron sus armas de fuego y comenzaron a tirotearse con los delincuentes.

En el enfrentamiento, tres de los cinco asaltantes fueron alcanzados por las balas. Mientras que el magistrado y su acompañante –que salieron ilesos– se dirigieron hacia la comisaría 8ª de Quilmes, donde comunicaron el hecho y entregaron un arma de fuego que incautaron en el lugar del enfrentamiento, los tres sospechosos heridos fueron trasladados al hospital Iriarte, de esa localidad.

Al arribar se constató el deceso de uno de los delincuentes: Nicolás Martínez, de 18 años. El domingo a la mañana murió otro: Emmanuel Jorge Cartagena, también de 18.

Este lunes se realizarán las autopsias de ambos, con las que se espera establecer la cantidad de disparos que recibieron y en qué zonas del cuerpo. También, para extraer los proyectiles con fines de comparación balística, de forma de determinar de qué armas salieron esos tiros.

“Todos los delincuentes involucrados poseen frondosos antecedentes penales”, explicó un investigador, quien añadió que al juez y a su custodio no llegaron a sustraerles ninguna pertenencia.

En tanto, personal de Criminalística de la Prefectura Naval realizó peritajes durante la madrugada para determinar cuántos disparos se realizaron en la escena del enfrentamiento. Mientras, son intensamente buscados los dos delincuentes que se dieron a la fuga tras el ataque.

La pistola Glock calibre 9 milímetros de García Maañón y la Bersa Thunder de su custodio fueron secuestradas para su peritaje, al igual que un pistolón Rexio.

La investigación del hecho quedó a cargo del fiscal Martín Conde, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°3 de Quilmes. Como en el suceso participó un menor, tomó intervención la fiscal María Julia Botasso, del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil N°2.

El fiscal Conde ordenó que se realicen los dermotest de las dos víctimas del asalto y de los jóvenes muertos, e inició una investigación por “homicidio y lesiones”, aunque no tomó temperamento restrictivo alguno con respecto al juez y a su custodio, al considerar que actuaron dentro de la legítima defensa.

En tanto, la fiscal de menores Botasso dispuso las declaraciones testimoniales de las víctimas y labró las actuaciones por “robo agravado en grado de tentativa”, a la vez que dispuso la detención del adolescente de 16 años, con aval del Juzgado de Garantías N°1 de Quilmes.

Un juez con vasta trayectoria

García Maañón es uno de los jueces con mayor trayectoria en el Departamento Judicial de San Isidro. Con la Sala I de la Cámara de Apelaciones y Garantías intervino, recientemente, en el fallo que denegó la excarcelación de Robledo Puch.

El camarista, que tiene varios familiares en el Poder Judicial, también integró la Sala III, que en abril pasado resolvió elevar a juicio, con ocho acusados, el caso de la muerte de Diego Armando Maradona.

“Fue juez de primera instancia, luego juez correccional y tras la reforma del sistema acusatorio, en 1998, se convirtió en juez de Cámara. Tiene más de 25 años como juez”, indicó a Télam una fuente judicial.

Allegados al magistrado confiaron a la agencia Télam que García Maañón iba dos veces al mes a practicar tiro, por lo que los investigadores asumen que el juez contaba con experiencia en el uso de armas.

Por su parte, familiares y conocidos de los dos delincuentes muertos despidieron a los jóvenes a través de las redes sociales.

“Se te va a extrañar ‘Pepón’, no caigo…”, fue uno de los posteos que apareció en Facebook junto a la foto de de Nicolás Martínez.

“Te voy a extrañar siempre, Emanuel”, decía otro de los mensajes de los familiares del otro joven muerto tras el tiroteo.