Edith Cavell, la enfermera que arriesgó su vida para salvar a cientos de soldados en la Primera Guerra Mundial

Edith Cavell fue una enfermera británica que arriesgó su vida para ayudar a cientos de soldados de Gran Bretaña y Francia a escapar de Bélgica, cuando fue ocupada durante la Primera Guerra Mundial.

Esta mujer nació el 4 de diciembre de 1865 en el pueblo inglés de Swardeston, cerca de Norwich, por lo que hoy, en el 153° aniversario de su nacimiento, Google la homenajeó al dedicarle un doodle. Finalmente, la ejecutaron acusada de traición.

Cavell decidió convertirse en enfermera a los 30 años, impulsada por el tiempo que dedicó a cuidar a su padre que padecía una grave enfermedad. Comenzó su entrenamiento con Eva Lückes, amiga de Florence Nightingale, en el Hospital Real de Londrés (Royal London Hospital), en Whitechapel.

Luego trabajó en hospitales en Shoreditch, King's Cross y Manchester, hasta que fue invitada a Bruselas para dirigir un nuevo hospital de entrenamiento para enfermeras. Considerada una pionera de la enfermería moderna en Bélgica, en 1910 fundó la revista médica 'Infirmière'.

En Bruselas trató a todas las víctimas de la guerra, sin importar a qué nacionalidad pertenecían. "No puedo parar mientras haya vidas que salvar", decía.

Además de su trabajo como enfermera, Cavell se involucró con un grupo clandestino que albergaba a soldados franceses y británicos y los ayudaba a escapar de Bélgica. En agosto de 1915, después de ayudar a unos 200 hombres, fue arrestada y acusada de traición. Confesó ante el tribunal militar y, a pesar de los pedidos generalizados de clemencia, fue ejecutada el 12 de octubre de 1915.

En 1917, se lanzó el "Fondo nacional para enfermeras" en su honor que buscaba recaudar el dinero suficiente para asistir a aquellos que "buscaban la salud de otros a expensas de la suya". Este fondo fue renombrado y pasó a llamarse "La confianza de las enfermeras de Cavell" (Cavell Nurses 'Trust).