Ingeniería, un nuevo monumento histórico

Fue declarado monumento histórico nacional el edificio de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires, situado en Paseo Colón 850 y donde funcionó durante siete años la Fundación Eva Perón. El Poder Ejecutivo promulgó ayer la ley 26.714, sancionada por el Congreso de la Nación el mes pasado, que así lo dispone.

El edificio es de estilo dórico y posee una superficie de 46.000 m2. cinco pisos y dos subsuelos. Tiene capacidad para albergar a 4300 alumnos.

En 1948 se creó la Fundación Eva Perón y se estableció en ese edificio la sede central de la institución. En esa época existía la Sociedad de Beneficencia de Buenos Aires, que tenía como costumbre elegir a la primera dama como presidenta honoraria de la institución. Sin embargo, la conducción de la Sociedad le negó a Eva Perón el cargo por "ser demasiado joven" y tampoco aceptaron que fuera su madre quien presidiera la institución. Como consecuencia, el gobierno clausuró y disolvió la Sociedad en septiembre de 1946.

Así, el 8 de junio de 1948, con una donación de 10.000 pesos, depositada en el Banco de la Nación, Eva Perón abrió la cuenta bancaria que daría origen a la Fundación de Ayuda Social María Eva Duarte de Perón, que reemplazaría a la Sociedad de Beneficencia que ella no pudo manejar.

Durante los siete años de trabajo, la Fundación distribuyó libros, alimentos, ropa, máquinas de coser, bicicletas y juguetes. Para las Fiestas, se hizo costumbre que la institución regalara sidras y pan dulce. Promovió también el otorgamiento de becas para estudiantes, ayudas para la vivienda y promoción de la mujer en diversas facetas. Estuvo a cargo, además, de la construcción de complejos hospitalarios, casas de ancianos o de madres solteras, escuelas y hogares de tránsito. Evita atendía personalmente a la gente que se acercaba para pedir cosas y su Fundación se convirtió en un organismo clave para la asistencia social, que llegó a tener más de 10.000 empleados.

La Fundación organizaba todos los años los Juegos Infantiles Evita y Juveniles Juan Perón, de los que participaban cientos de miles de niños y jóvenes de sectores humildes. Se mantienen vigentes obras llevadas a cabo por la fundación como, por ejemplo, el complejo habitacional Ciudad Evita en La Matanza, la República de los Niños, en Gonnet, y numerosos hospitales.

Los fondos de la institución eran donaciones voluntarias y aportes obligatorios exigidos a los empleados públicos dos veces al año. La fundación fue muy criticada por utilizar fondos, inmuebles, medios de transporte y personal del Estado.

La actividad de la Fundación disminuyó cuando Eva Perón murió, en 1952. Tres años más tarde, Juan Domingo Perón era derrocado por la Revolución Libertadora, que casi inmediatamente destinó el uso del edificio a la Facultad de Ingeniería de la UBA. La obra, aún inconclusa, fue encargada al ingeniero Enrique Cáceres, de la Dirección de Arquitectura de la Secretaría de Obras Públicas. En 1957 se inauguró parcialmente, pero la obra fue culminada en 1966, año en que la Facultad comenzó a funcionar en el edificio.

La facultad funcionó muchos años en la Manzana de las Luces, en la calle Perú 222, hasta que en 1948 recibió el edificio de Las Heras 2214 y en 1956, el de Paseo Colón. En la actualidad pueden cursarse las distintas ramas de ingeniería: civil, de alimentos, electricista, electrónica, agrimensura, informática, industrial, mecánica, naval y mecánica, química y la licenciatura en análisis de sistemas.