Intimidaron a dos fiscales antes del veredicto de jurados
Habían pasado unos pocos minutos de las 20 y el fiscal Daniel Dabue junto con la ayudante fiscal Lorena Pecorelli ya estaban a 20 cuadras de la Sala I de la Cámara Penal de La Matanza, donde se realizó la primera audiencia en un juicio por jurados contra cuatro agentes del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) por los delitos de torturas y apremios ilegales. Cada uno circulaba en su auto cuando otro vehículo se cruzó en el camino y desde el interior arrojaron un objeto contundente contra el rodado de Dabue. No era el primer mensaje intimidatorio que recibían esos representantes del Ministerio Público.
Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. Por el ataque intimidatorio se abrió una investigación que recayó en el fiscal de La Matanza José Luis Maroto.
El debate, presidido por el juez Nicolás Grapasono, integrante del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 4 de La Matanza, continuó ayer a puertas cerradas. Pasadas las 17, los integrantes del jurado popular dieron a conocer su veredicto: declararon a los cuatro acusados no culpables.
Según informaron del Ministerio de Justicia bonaerense, los cuatro agentes del SPB acusados y que ahora fueron declarados no culpables habían sido puestos en disponibilidad. Ahora, tras el veredicto emitido por el jurado popular, podrán volver a sus puestos.
"La absolución significa que el hecho que les fue imputado no existió. Por lo tanto pueden volver a trabajar", afirmaron las fuentes consultadas.
La causa se había iniciado en enero de 2016 por una denuncia de dos internos de la Unidad Penitenciaria N° 43, en la localidad de González Catán.
Respecto del mensaje mafioso del que fueron víctimas los representantes del Ministerio Público, fuentes cercanas al ministro de Justicia bonaerense, Gustavo Ferrari, explicaron que el funcionario rechaza todo tipo de hecho intimidatorio hacia los fiscales.
Custodia
Anteanoche, apenas tomó conocimiento del ataque contra Pecorelli y Dabue, la fiscal general de La Matanza, Patricia Ochoa, se comunicó con autoridades locales de la policía bonaerense y se dispuso una custodia para esos representantes del Ministerio Público.
Además, Ochoa estuvo ayer presente en la audiencia para mostrarle su apoyo a Dabue y Pecorelli. La fiscal general de La Matanza estuvo en el juicio hasta el cuarto intermedio que se abrió para que los 12 integrantes del jurado popular pudiesen deliberar antes de emitir el veredicto.
"El objeto contundente que arrojaron los desconocidos, que pudo haber sido una piedra, impactó en el parabrisas del automóvil del fiscal Dabue", explicó una fuente judicial al tanto de los hechos.
Inmediatamente después del ataque, se asignó custodia en la casa de Dabue para proteger al fiscal y a su familia.
El ataque de anteanoche no fue el primer episodio extraño ocurrido mientras se desarrollaba el juicio contra los cuatro acusados que resultaron absueltos. Pocas horas antes, fue tajeado un neumático del automóvil de un secretario de la Cámara Penal de La Matanza.
Respecto del juicio, funcionarios judiciales que estuvieron presentes en el debate dijeron que no les sorprendió el veredicto de no culpabilidad.
"Es muy difícil de probar judicialmente los hechos de tortura porque las víctimas y testigos siguen bajo la órbita del SPB y se los intimida. No hay ningún tipo de protección. El problema es que los denunciantes llegan solos al juicio. Las víctimas de tortura no tienen ningún tipo de contención psicológica", dijo Roberto Cipriano, secretario de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM).