Los interventores en el PAMI intentan convertir el concurso de precios que lanzaron la semana última -para el que ya se vendieron 126 pliegos- en un caso testigo de transparencia. El objetivo es revertir la presunta "corrupción estructural" dentro de la obra social más grande del país.
"No habrá margen para ninguna discrecionalidad y las pautas estarán claras para todos", sostuvo el interventor Horacio Rodríguez Larreta (h.). Según el funcionario, la puesta en marcha del nuevo sistema médico permitirá dar un vuelco en la relación con los prestadores. Algunas diferencias:
Se reducirá al mínimo el modelo de intermediación que impulsó el ex titular del PAMI, Víctor Alderete. Los establecimientos y profesionales que presenten ofertas deberán unirse en asociaciones sin fines de lucro. Así, según Rodríguez Larreta, se "atomiza la oferta y se evitan los monopolios con demasiado poder".
Para los pagos se utilizará un sistema de fideicomiso. Para ello se firmó un convenio con el Banco Nación que recibirá los fondos y los distribuirá entre los prestadores.
Los pliegos, que pueden consultarse en forma gratuita por Internet, en http://www.pami.org.ar , introdujeron una cláusula anticorrupción y la exigencia a los prestadores de aportar datos estadísticos.
Para garantizar la transparencia en la adjudicación del concurso colaborarán organismos nacionales (como la Sindicatura General de la Nación y la Auditoría General) y extranjeros (como las Naciones Unidas). Y también se lanzará un nuevo sistema de control.
Nuevas tarjetas magnéticas
Un ejército de auditores, de entre 300 y 500 personas, seguirá de cerca no sólo a los futuros prestadores sino también a las 36 sucursales que el PAMItiene en todo el país, según confirmó a La Nación Rodríguez Larreta (h.). "El número de auditores dependerá de cómo quede el mapa prestacional que estamos terminando de armar", explicó el interventor.
Se instrumentará un sistema de tarjetas magnéticas para todos los afiliados. La idea es crear una base de datos confiable y tener un control sobre ella. Al mismo tiempo, hacia fines de marzo, la intervención terminará de depurar el padrón de afiliados, en el que se sospecha hay beneficiarios inexistentes, ya fallecidos o duplicados.
"La tarjeta permitirá un mayor control sobre la afiliación en general -dijo Rodríguez Larreta-. Además, los prestadores podrán consultar los datos y las historias clínicas de los beneficiarios a través de computadoras conectadas on line ".
En una segunda etapa, se prevé que el plástico permita a los jubilados acceder a una serie de servicios sociales, como descuentos en servicios públicos, alimentos y transportes.
Pero no sólo se trata de evitar los hechos irregulares. "Tomamos la decisión de trabajar muy rápido -explicó Rodríguez Larreta (h.)-. Para los próximos meses esperamos bajar los costos y poner los números del PAMI en caja." Así, el funcionario consideró que el concurso de precios permitirá un ahorro en las prestaciones médicas de entre 15 y 20 por ciento, en comparación con las contrataciones actuales.
Desde que llegaron hace dos meses a las oficinas de Perú 169, los interventores tomaron la prioridad de reducir el déficit: hoy, el PAMI pierde un millón de pesos por día.
