Rutas a la costa: Tránsito intenso y expectativas de muy alta ocupación en Semana Santa

MAR DEL PLATA.— Intenso desde temprano y con expectativas de un pico a media tarde es el tránsito que se advierte en las rutas que conducen a las principales localidades turísticas bonaerenses, en particular las de la costa atlántica, donde se espera una muy alta ocupación durante esta Semana Santa.

El flujo de vehículos desde Capital Federal y Gran Buenos Aires es constante desde las últimas horas de anoche y se afirmó con las primeras luces de hoy, cuando la autovía 2 y la interbalnearia 11 empezaron a ver su mayor movimiento.

Según información suministrada por Aubasa, empresa que administra estos corredores viales, poco después de media mañana circulaban hacia la costa a razón de 2500 vehículos por hora, con unos 1500 que desviaban hacia los balnearios del norte y otros 1000 que cruzaban el peaje de Maipú, rumbo a esta ciudad y otras playas del sudeste bonaerense.

También los servicios de trenes llegaron completos y tienen pasajes agotados hasta el sábado para venir a Mar del Plata. Y otro tanto se dio con los ómnibus de larga distancia, que tras la obligada suspensión de actividades por la cuarentena del año pasado poco a poco van retomando su ritmo. Esta vez se sumaron más servicios adicionales para atender a la creciente demanda de pasajes a la costa.

Los operadores turísticos de las distintas localidades coincidían en muy óptimas expectativas sobre lo que pueda proveer este fin de semana extra largo, al que por el nivel de reservas se lo empieza a comparar con el reciente de Carnaval, muy exitoso a pesar del mal tiempo durante esos días.

Visitantes sin reservas

En destinos como Cariló, Mar de las Pampas y otros pequeños en dimensión pero generosos en oferta de alojamiento se esperaba una ocupación plena en el rubro hotelero y complejos de cabañas y hoteles.

Por Pinamar y Mar del Plata, por ejemplo, los pedidos tanto de habitaciones como de departamentos y casas en alquiler por estos cuatro o cinco días habían cubierto hasta poco más del 60% de la oferta publicada. Pero hay confianza en que, como se percibía esta mañana con mayor intensidad, aparezcan visitantes sin reservas previas, quizás tentados por un pronóstico meteorológico más que potable.

Para este fin de semana se esperan en la costa temperaturas otoñales, no superiores a los 23 grados, pero en principio sin lluvias a la vista. Sí algunos nubarrones, como los que hoy opacaron de a ratos la jornada.

La mañana gris fue más que bien recibida por los recién llegados, que aprovecharon para pasear por la costa y, ya sobre el mediodía, empezar a elegir dónde almorzar.

El puerto se volvió pronto en uno de los destinos más concurridos, tanto por sus paisajes como con sus ofertas gastronómicas ricas en mariscos y pescados, siempre favoritos en estos días de Semana Santa.