Doble golpe de Europa a Apple y Google: deberán pagar más de 15.000 millones de euros en multas
La Justicia europea desestimó el mismo día las apelaciones de Apple y Google sobre multas de 2016 y 2017 y deberán pagar: 13.000 millones de euros en impuestos adeudados en el caso de Apple, y un castigo de 2400 millones de euros para Google por darle preferencia a sus servicios por sobre los de sus competidores
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Margrethe Vestager, comisaria de Competencia de la Unión Europea, se anotó dos importante svictorias el martes cuando el máximo tribunal europeo respaldó su ofensiva contra el acuerdo fiscal irlandés de Apple y las prácticas anticompetitivas de Google en dos casos históricos. Vestager, que termina su mandato en noviembre, se ha hecho famosa por su persecución de los acuerdos fiscales de las grandes tecnológicas con algunos países de la UE y los intentos de estas de ahogar a los competidores más pequeños. Las victorias judiciales podrían animar a su sucesor a adoptar un enfoque similar.
La responsable antimonopolio de la UE celebró las sentencias. “Hoy es una gran victoria para los ciudadanos europeos y la justicia fiscal”, dijo en la red social X sobre la sentencia de Apple, elogiando también la sentencia de Google como una gran victoria para la equidad digital.
Apple: 13.000 millones de euros
La Comisión Europea condenó en 2016 a Apple a pagar 13.000 millones de euros (14.400 millones de dólares) en impuestos atrasados a Irlanda, al considerar que el fabricante del iPhone se benefició durante más de dos décadas de dos resoluciones fiscales irlandesas que redujeron artificialmente su carga fiscal hasta un 0,005% en 2014. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea, con sede en Luxemburgo, dio la razón a Vestager.
“El Tribunal de Justicia dicta sentencia firme en la materia y confirma la decisión de 2016 de la Comisión Europea: Irlanda concedió a Apple una ayuda ilegal que Irlanda está obligada a recuperar”, han declarado los jueces.
Dijeron que las dos unidades de Apple constituidas en Irlanda disfrutaron de un trato fiscal favorable en comparación con las empresas residentes que tributan en Irlanda y que no pueden beneficiarse de tales resoluciones anticipadas de las autoridades fiscales irlandesas. Apple, que dijo que pagó 577 millones de dólares en impuestos, el 12,5% de los beneficios generados en el país, de acuerdo con las leyes fiscales en Irlanda en el período 2003-2014 cubierto en la investigación de la UE, dijo que estaba decepcionada con el fallo.
“La Comisión Europea está tratando de cambiar retroactivamente las reglas e ignorar que, como exige la legislación fiscal internacional, nuestros ingresos ya estaban sujetos a impuestos en Estados Unidos”, dijo Apple. Irlanda, cuyos bajos tipos impositivos le ayudaron a atraer a las grandes tecnológicas para establecer sus sedes europeas, también había impugnado la sentencia de la UE, alegando que su tratamiento fiscal de las transacciones de propiedad intelectual está en consonancia con el de otros países de la OCDE. Aun así, ha cooperado en una revisión de las normas mundiales del impuesto de sociedades y ha hecho lo que antes era impensable al abandonar su oposición a renunciar a su preciado tipo impositivo del 12,5%. Sin embargo, su recaudación fiscal de las empresas multinacionales ha aumentado desde entonces.
Google: 2420 millones de euros
El Tribunal también desestimó el recurso de la unidad de Alphabet, Google, contra una multa de 2420 millones de euros impuesta por Vestager hace siete años, la primera de un trío de cuantiosas multas impuestas a la empresa por diversas prácticas contrarias a la competencia.
“A la luz de las características del mercado y de las circunstancias específicas del caso, la conducta de Google era discriminatoria y no entraba en el ámbito de la competencia en cuanto al fondo”, dijeron los jueces.
Google expresó su decepción por la sentencia. “Esta sentencia se refiere a un conjunto muy específico de hechos. Ya hicimos cambios en 2017 para cumplir con la decisión de la Comisión Europea”, dijo un portavoz. La Comisión multó al buscador de internet más popular del mundo en 2017 por utilizar su propio servicio de comparación de precios de compras para obtener una ventaja desleal sobre rivales europeos más pequeños.
Google ha acumulado 8250 millones de euros en multas antimonopolio de la UE en la última década. Ha impugnado dos sentencias relacionadas con su sistema operativo para móviles Android y su servicio de publicidad AdSense, y ahora está a la espera de las sentencias. También está luchando contra los cargos antimonopolio de la UE emitidos el año pasado que podrían obligarla a vender parte de su lucrativo negocio de tecnología publicitaria después de que los reguladores la acusaran de favorecer sus propios servicios publicitarios.
Ambas sentencias son firmes e inapelables.
Problemas para Google también en Gran Bretaña
La decisión se suma a la que tomó el viernes pasado el regulador antimonopolio británico, que determinó provisionalmente que Google abusó de su posición dominante en la publicidad digital para restringir la competencia. La Autoridad de Competencia y Mercados (CMA, por sus siglas en inglés) dijo que creía que Google estaba utilizando prácticas anticompetitivas en la tecnología de anuncios de visualización abierta a través de la preferencia de su propio mercado de anuncios, lo que podría estar perjudicando a miles de editores y anunciantes británicos.
”Hemos constatado provisionalmente que Google está utilizando su poder de mercado para obstaculizar la competencia en lo que respecta a los anuncios que los usuarios ven en las páginas web”, dijo Juliette Enser, directora ejecutiva interina de aplicación de la CMA. “Muchas empresas pueden mantener su contenido digital gratuito o más barato utilizando la publicidad en línea para generar ingresos. Los anuncios en estas páginas web y aplicaciones llegan a millones de personas en todo el Reino Unido, ayudando a la compra y venta de bienes y servicios”.
Google dijo que no estaba de acuerdo con la opinión de la CMA y que respondería en consecuencia. ”Nuestras herramientas de tecnología publicitaria ayudan a páginas web y aplicaciones a financiar su contenido, y permiten a empresas de todos los tamaños llegar a nuevos clientes de forma eficaz”, dijo Dan Taylor, vicepresidente de Anuncios Globales de Google.
Con información de Reuters
LA NACION