Finalmente Nokia encontró socio para hacer smartphones y tabletas con Android

Nokia informó hoy que firmó un acuerdo de licenciamiento de marca con la firma finlandesa HMD, delegando en ésta el uso de la marca Nokia para poner en smartphones y tabletas. No es inesperado: es lo que la compañía dijo, en octubre último , que quería lograr. Le faltaba un socio que tomara su marca, sus patentes y el diseño de los equipos -que sigue haciendo Nokia- y los transformara en un producto comercial.

Lo probó con la tableta Nokia N1 (que diseñó la finlandesa, y fabricó y vendió la china Foxconn ), como una forma de sacar dinero del valor que todavía tiene la marca, pero sin transformarlo en un negocio de riesgo: delega en otro la inversión en el hardware, la logística, etcétera (lo más caro en un teléfono), pero define el diseño y sus características, y tiene injerencia en el control de calidad del producto. Es decir, minimiza riesgos, pero no permitirá -en teoría, claro- que se haga un producto con la marca Nokia que la compañía considere de mala calidad.

Nokia (que en 2013 vendió su división de celulares a Microsoft pero sigue existiendo), está hoy más interesada en otros terrenos: además de la infraestructura de redes (donde amplió su presencia ya destacada con la compra de Alcatel-Lucent), en las últimas semanas compró Withings, la firma francesa que está apostando por la Internet de las cosas y el mercado de la tecnología personal para el monitoreo de la salud.

Lo interesante aquí es que HMD, la firma que ahora buscará encontrar si el mercado tiene todavía interés en un smartphone Nokia con Android, también le compró a Microsoft la marca, el software y demás elementos relacionados con los celulares que Microsoft había comprado en 2013; los empleados y las plantas de producción de los celulares no inteligentes que todavía sigue vendiendo pasan a FIH, una subsidiaria de Foxconn. No está de más recordar que al comprar los celulares de Nokia, Microsoft también se quedó por diez años con la licencia de uso de la marca para teléfonos básicos, pero que este año venció el impedimento legal para que Nokia (la original, la que quedó) use su propia marca para poner en smartphones. Esa licencia para teléfonos básicos es la que transfiere hoy, si lo aprueban sus accionistas. Así, HMD tiene los recursos legales para ofrecer una gama completa de productos: celulares tradicionales, smartphones y tabletas.

Decir que lo que le espera a los exejecutivos de Nokia y Microsoft que fundaron HMD es una tarea dificilísima es simplificar las cosas: deberán competir con múltiples fabricantes, con una gran variedad de productos, y en un mercado en el que casi nadie, salvo Apple y Samsung, logra obtener ganancias.

Por el lado de Microsoft, queda claro que su estrategia para móviles está en un impasse (algo que ya habían adelantado los propios ejecutivos de la compañía); aunque asegura que seguirá dando soporte a Windows 10 Mobile y a los Lumia, que están fuera de esta transacción, parece que será 2017 cuando veamos un smartphone Nokia con Android y, quizás, el primer Surface Phone con Windows 10 Mobile.