Cerro Catedral: restaurantes y refugios para comer

El Cerro Catedral es el centro de esquí más grande de Sudamérica. Su oferta gastronómica es variada, con numerosas opciones tanto en la Base como en las laderas de la montaña. Aquí una guía para saber dónde hacer un alto y recuperar energías.

Desde las bases

En la Base del cerro, a pocos metros del estacionamiento y el acceso a los medios de elevación, una de las propuestas que siempre está abierta -con lluvia, viento o nieve- es Tage, con más de 50 años de trayectoria en la montaña a cargo de la familia Rosenkjaer. Comidas rápidas, entre las que se destacan el lomito, las hamburguesas y el goulash con spetzl, siempre con el acompañamiento de la música tirolesa en honor a sus raíces.

En el Shopping Las Terrazas, un área con todo tipo de servicios frente a la Plaza Catalina Reynal, otro de los recomendables es el Café Las Terrazas. Excelentes ensaladas, tartas caseras y buenos platos del día. Y entre las novedades de la Base, cerca del acceso a telesilla Cóndor, se sumó una nueva propuesta llamada Kandahar, un clásico de Bariloche que abrió un salón cervecero con happy hour y after ski hasta las 23, y otro salón VIP con platos clásicos.

La Roca escocesa

En la ladera sur de la montaña, con ascenso por Telecabina Amancay hasta unos 1800 metros de altura, se encuentra uno de los paradores gastronómicos más pintorescos y grandes de la montaña. Se trata de La Roca, a cargo del chef escocés Archie MacLellan. En su salón con enormes ventanales que dan al lago Gutiérrez, ofrece típicos ribs estilo norteamericano y, como novedad de esta temporada, una imperdible lasagna de cordero braseado. Afuera, tiene un deck con mesas desde donde se aprecia la pista 2000 y un área de principiantes. Desde allí, se accede a la Telesilla Diente de Caballo.

Cabaña 1600

En la zona central de Cerro Catedral, apenas termina la Telesilla Séxtuple, uno de los medios troncales del centro de esquí, está Cabaña 1600, un espacio cálido para almorzar o tomar alguna bebida caliente que ayude a recuperar temperatura. Hay platos de montaña, parrilla y dulces. El distintivo de ese parador es su decoración artística, con cada una de sus mesas intervenidas de manera muy colorida por el grupo CreArte, una asociación local sin fines de lucro que trabaja en la educación no formal de chicos con discapacidad. Hasta este lugar sólo llegan los esquiadores o snowboardistas.

Punta Nevada y El Cabo

Un poco más arriba, con acceso también para peatones a través del Tour Histórico, que asciende por el CableCarril, se encuentran los paradores Punta Nevada y El Cabo. A unos 1800 metros de altura, es un sitio donde confluyen también las pistas más concurridas. Se ofrecen pizzas y empanadas caseras, cerveza tirada y comida especialmente elaborada para celíacos. Además, durante la temporada se organizan shows musicales y bajadas especiales al atardecer los días de luna llena.

Refugio Lynch

En la cumbre de Catedral, con vistas privilegiadas del cerro Tronador, la montaña más alta de la región con más de 3000 metros de altura, lo imperdible es el Refugio Lynch. El lugar abrió esta temporada con nuevos concesionarios. Maximiliano Martínez Almudevar, uno de los referentes a cargo del lugar, resalta que el objetivo es "armar una propuesta diferencial" junto al chef de Buenos Aires Martín Molteni. Tiene dos pisos con grandes ventanales y un deck de madera para los días de sol. Entre las especialidades: salteado de pollo, carbonada vegetariana o con carne, sopas caseras y hamburguesas.

Precios

Un almuerzo rápido con bebidas, ronda entre $300 y $400. Los platos más elaborados rondan los $500. Un chocolate caliente en la montaña cuesta $140 y un capuccino $160, mientras que en la Base puede haber promociones desde $200, con de bebida caliente y alfajor, medialunas o una torta.