Un viaje a Portugal dejó un momento insólito para Max Verstappen. El campeón del mundo de Fórmula 1 desembarcó en Algarve, ciudad a la que viajó con familiares y amigos para pasar unas vacaciones, y aprovechó para probar algunos autos de GT, en el circuito de Portimao. Pero se encontró con la negativa para poder conducir un vehículo de alquiler.