El Open británico de golf: Jon Rahm tira magia y presiona al Cazador, en un final que puede deparar cualquier cosa

Las condiciones esperadas no eran las óptimas para jugar al golf en Royal Liverpool, pero sí típicas de la zona, ya que se preveían vientos fuertes, lluvias y frío. Si bien por momentos se podía apreciar a fanáticos, golfistas, caddies y asistentes en general, con paraguas y camperas de lluvia, el clima no influyó demasiado en la performance de los jugadores citados en el trazado de par71 de 7383 yardas para la tercera vuelta del Open británico.

El español y número 3 del mundo Jon Rahm, encendido, que arrancó marcando la mejor ronda del día con 63 golpes (-8), resultado de ocho birdies y diez pares para un total de -6, sin errores en todo el recorrido, buscará emular a su compatriota Severiano Ballesteros, único español en ganar la Claret Jug, quien lo consiguiera en tres oportunidades: Royal Lytham & St. Annes Golf Club, dos veces en 1979 y 1988 y en St. Andrews Links 1984.

Al finalizar la ronda, “Rahmbo” declaró: “Pude aprovechar el viento a favor y los putts del 15, 16 y 18; yo ya cumplí mi parte, ahora depende de Harman”, pasándole la presión al puntero del 151º Open Británico, que no puede imponerse en un torneo desde aquel Wells Fargo, ganado en 2017. Cuando el español terminaba su día competitivo, el estadounidense Brian Harman salía por el tee del 1 con -10, sin mirar el tablero, pero sabiendo que debía completar una buena jornada para quedar con chances el domingo.

“Fue la mejor vuelta de mi vida”. Esa presión que le había impuesto el vizcaíno iba a pesar sobre Harman, quien arrancó su vuelta con bogey en el 1 y el 4, con lo que quedó en -8 y comprometido, pero después se recuperaría instantáneamente bajando el 5 y el 9, para cerrar la ida en par. Ya en los segundos nueve hoyos, relajado y con ritmo, se le haría todo un poco más fácil, embocando birdies consecutivos en el 12 y 13. Tras su ronda, el oriundo de Savannah, Georgia y cazador aficionado contó: “Pegué algunos malos tiros y sabía que los jugadores iban a completar una buena ronda; me quedan 18 hoyos en donde voy a tener que hacer las cosas bien y mantener la calma”.

Más reflexiones de Rahm. “Fue uno de esos días en que me siento invencible”. Y sobre su compatriota Severiano Ballesteros, grande entre grandes, quien nunca hizo 63 en este torneo, advirtió: “Prefiero sus tres Opens que este score...”.

Por su parte, otro de los que sigue de cerca al puntero es Cameron Young (EE.UU.), 18º en el ranking mundial, quien estuvo cerca de ganar en 2022 en la Catedral del golf, el Old Course de St. Andrews, Escocia, donde finalmente se consagró el australiano Cameron Smith. Young terminó el día con -7, tras seis birdies, once pares y un bogey, y saldrá con Harman en el grupo final, a cinco golpes. Una diferencia importante, pero no decisiva.

Por otro lado, entre los latinos, el más destacado es el argentino Emiliano Grillo. El chaqueño, de 30 años, que hace diez temporadas está en la elite del golf mundial, se mantiene expectante luego del gran arranque del jueves (66), cuando se instaló en la vanguardia del certamen. Pese a un comienzo irregular, redondeó una sólida actuación, con cuatro birdies y tres bogeys. De esa forma, con 70 golpes, totalizó -3 para quedar compartiendo el undécimo puesto de cara a la jornada final.

Padre de André desde hace un año, Grillo sentenció: “Pegué un poco mejor desde el tee. El día estaba un poco más accesible, por ahí no tanto la cancha. Jugué bien, aguanté lo que tenía que aguantar, metí lo que tenía que meter y por ahí un par de errores bastante costosos que me frenaron, pero otra vuelta bajo el par siempre suma y aún queda mucho golf por delante. El que mejor juegue es el que va a ganar”.

El chaqueño saldrá este domingo con el norirlandés Rory Mcilroy, quien ya sabe lo que es ganar este torneo, cuando lo hizo en 2014, justamente en este mismo campo.

A su vez, otro de los representantes latinoamericanos que pudo pasar el corte, es el mexicano Abraham Ancer, quien cerró su ronda en par de cancha y está +1 para el campeonato, en el puesto 41°, empatado con otros golfistas.

El que ya se ganó su premio, es el sudafricano amateur Christo Lamprecht quien, a pesar de haber culminado una muy mala ronda (+5) y estar +8 para el campeonato, el haber pasado el corte como único aficionado en realizarlo, le es suficiente para alzarse con la Medalla de Plata que le otorga este prestigioso torneo.

Hace diez años que un zurdo no gana el Open. La última vez que esto ocurrió fue el estadounidense Phil Mickelson, en Muirfield 2013. ¿Aguantará Harman la presión de estar puntero y podrá cambiar esa historia para llevarse la Claret Jug? Apenas 18 hoyos lo separan de esa respuesta y de la gloria eterna. Con Young y Rahm mirando de reojo.

Compacto de la tercera vuelta del Open británico

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