La cuarentena en el campo. Con la cosecha en marcha y la irrupción de barbijos

Las actividades ligadas al campo quedaron exceptuadas de la cuarentena obligatoria por el coronavirus dispuesta por el presidente Alberto Fernández. Tranqueras adentro, los productores están haciendo tareas que van desde la cosecha, trabajos en los tambos, recorridas ganaderas, entre otras.

En algunos lugares las primeras horas fueron de incertidumbre porque hubo algunas policías locales que demoraron el paso de quienes tenían que ir desde las ciudades a los campos. Sin embargo, la activación de protocolos y declaraciones juradas en conjunto con las provincias fueron volviendo la situación a la normalidad.

Quienes están cosechando en las zonas agrícolas de la pampa húmeda embolsan la mayoría de la soja porque, si bien las terminales portuarias están operando, hay dudas sobre la disponibilidad de camiones en medio de la emergencia por la enfermedad, entre otros factores.

"Estamos dando prioridad a la soja y embolsando todo en silobolsas", contó Juan Pablo Iole, asesor de productores en el sudeste cordobés. Según dijo, se están consiguiendo por el momento máquinas para hacer el embolsado, pero señaló que hay una alta demanda.

Se le da prioridad a la soja porque, por la estructura de su planta, las chauchas se pueden abrir cuando ya está para la cosecha y caer los granos. En cambio, "el maíz aguanta", como destaca Ioele, y su recolección puede esperar.

Ioele afirmó que se están siguiendo protocolos y recaudos, entre otros que en las cabinas de las máquinas solo vaya una persona.

Esteban Viotto es productor de la zona de Las Peñas Sud, en Córdoba. Le contó a LA NACION que estuvo cargando maíz para una destilería cercana y que se preparaba para aplicaciones de fungicidas en maíz con un servicio contratado de aplicación aérea.

También buscó enviar cereal para una cooperativa cercana, pero anoche le avisaron que, por la cuarentena, la oficina no iba a estar abierta y cancelaron la operatoria.

Consultado sobre cómo estaba la posibilidad de movilizarse por las rutas, la describió como "complicada". Puso el ejemplo de un conocido que viajaba a Córdoba para buscar agroquímicos pero se tuvo que volver por orden de la policía.

"No hay bolsones", apuntó, graficando otro costado del momento en plena cosecha. Es decir, como señaló Ioele, hay una fuerte decisión por cosechar y almacenar en silobolsas.

En el campo de Walter Malfatto, en Bragado, hoy estaban haciendo reparaciones en las máquinas porque en cuatro o cinco días comienzan la cosecha de soja. Los operarios trabajan con barbijos y hay alcohol en gel en el galpón de reparaciones.

"Estamos con la actividad normal", describió. Agregó que en la zona "se agotaron los bolsones" y que los productores se prepararon para cosechar y embolsar.

Fuentes del mercado de silobolsas reconocieron que "se disparó la demanda" de los productores y que el abastecimiento se está haciendo como siempre. No obstante, reconocieron: "Si sigue este nivel de demanda en unas semanas la vamos a correr de atrás".

Por el lado de la exportación, hasta el momento, y más allá de una nueva amenaza de paro de recibidores de granos, los puertos están operando.

Según un informe de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), hasta el 31 del actual está prevista la llegada de 82.582 camiones a los puertos cerealeros y fábricas, además del arribo de 44 barcos y 1850 vagones de trenes. Por la enfermedad, los exportadores emitieron un nuevo protocolo nacional de seguridad y prevención de todos los puertos del país acordado con el Gobierno.

Diversas organizaciones, como el INTA, brindaron recomendaciones para llevar adelante el manejo de la cosecha en el contexto del coronavirus. Entre otras,

• Restringir el acceso a personas de riesgo (personas mayores de 60 años, personas con enfermedades de base, respiratorias y las que tienen afecciones como diabetes).
• Antes de iniciar las actividades de cosecha y poscosecha, acordar la metodología de trabajo con el equipo interno y externo (productor, asesor, contratista, operarios, camioneros, acopiadores, etc.); y en lo posible, mantener comunicación por telefonía celular para evitar el contacto directo.
• Evitar el contacto directo en todas sus formas y en caso de ser imprescindible, tomar las medidas de prevención antes y después del contacto. Para evitar rondas de mates, es recomendable llevar su propio equipo, como así también la vajilla personal (cubiertos y vaso) y elementos de aseo personal (toallas y otros).
• Reducir al máximo la movilidad de personas y solicitar a proveedores que los servicios sean prestados por las mismas personas (camioneros, maquinistas, asistentes).
• Procurar realizar la menor movilización granos en esta época. Se sugiere prever el almacenamiento en estructuras propias disponibles en los establecimientos o programar el almacenaje en silo bolsas (previsión de bolsas y equipos para embolsado de granos).
• Evitar aglomeraciones de personas, tanto en las actividades laborales como en campamentos, casilla, rondas, reuniones, etc.
• Limpiar y desinfectar meticulosamente los elementos que necesariamente se compartan con contacto directo (carta de porte, llaves, herramientas, lapicera, memoria del monitor de rendimiento, etc.).
• Casilla rural: por tratarse de un lugar crítico para el contagio por los espacios reducidos, se recomienda turnarse para las comidas y exigir barbijos (tipo N95), también para el descanso. Es sumamente importante mantener la higiene con desinfectantes y lavandina en este espacio de convivencia.
• Las cosechadoras, tractores y camiones deben ser ocupados únicamente por el operario capacitado, evitando los acompañantes.

Ayer, varios contratistas forrajeros que hacen silo de maíz para la alimentación ganadera tuvieron dificultades para avanzar en los campos por las restricciones en distintas provincias.

Hoy, la cámara que los nuclea organizó desde temprano una videoconferencia con los principales coordinadores y empresas que operan a lo largo y ancho del país. Entre las medidas que tomaron fue que los equipos que se movilizaran a realizar tareas en el campo lo hicieran con una sola persona dentro del vehículo, una carta respaldatoria de la empresa y la impresión del DNU en el que exceptúa de la cuarentena obligatoria a todas las actividades vinculadas con la producción, distribución y comercialización agropecuaria.

"En el límite entre Buenos Aires y La Pampa todo lo que está relacionado con la actividad agropecuaria no lo pueden parar. Me dijeron que están haciendo controles sanitarios en caso de ser necesario. Nosotros imprimimos el artículo publicado en el Boletín Oficial, subrayamos el inciso (13), la declaración jurada de la empresa para demostrar que son empleados agropecuarios para que los dejen circular", dijo Walter Barneix, un contratista forrajero.

Hasta ayer la provincia de San Luis estaba completamente blindada, lo que representaba un problema para los contratistas, pero luego del anuncio del Gobierno, según le dijeron a LA NACION, podrán circular presentando la documentación necesaria. "Acabo de sacar un equipo para La Pampa y en 4 días va a Mendoza y tiene que pasar por San Luis, esperemos que no pase nada", contó Barneix.

Desde temprano, los contratistas comenzaron a realizar llamados a los puestos de control en las rutas para constatar que los empleados no iban a tener problemas para circular por los límites de las provincias.

"Por ahora no vamos a mover camiones ni maquinaria por precaución. Hoy temprano movilizamos al personal con una nota que certifica que son empleados de la empresa y son agropecuarios. Antes, consultamos con las autoridades de la provincia y algunos puestos de control para saber si cuando vuelvan en 3 o 4 días no van a tener problema", aseveró Patricio Aguirre Saravia.

"El problema que estamos teniendo es que hay quienes no entienden que nuestra actividad está relacionada con el campo. Hubo gente a la que les dijeron que a los contratistas no se los contemplaba en el DNU", precisó Aguirre Saravia.

Con la colaboración de Belkis Martínez