Deuda. El acuerdo acelera las discusiones entre las provincias y sus acreedores

CORDOBA.- Los gobernadores de varias provincias que están negociando un reperfilamiento de sus deudas esperaban el acuerdo de Nación para poder avanzar más velozmente. Sucede que sin ese paraguas era complejo por el riesgo de generar "ruidos" en las conversaciones de Martín Guzmán con los acreedores. Ahora, coinciden en que cuando se terminen los detalles del acuerdo, ellos acelerarán sus propias conversaciones y que hay un "piso" desde donde partir.

El ciclo lógico indicaría que Buenos Aires, la jurisdicción más grande, debería ser la próxima en arreglar. El gobernador Axel Kicillof extendió por quinta vez el plazo, hasta el viernes 14 de agosto, para renegociar la deuda emitida bajo legislación extranjera. "En este periodo continuaremos manteniendo conversaciones con los acreedores, a quienes les reiteramos el compromiso con las deudas asumidas, pero siempre bajo un esquema de repago que resulte sostenible en el tiempo", indicaron desde la provincia. La deuda a reestructurar es de U$S 7148 millones.

Fernando Baer, economista de Quantum Finanzas, explica a LA NACION que una negociación en paralelo podría haber "empañado" la de Guzmán y, a modo de ejemplo, apunta el caso de Buenos Aires.

Después del distrito gobernado por Kicillof deberían encolumnarse los otros distritos grandes, como Córdoba, Mendoza y Santa Fe. La provincia gobernada por Juan Schiaretti tiene dos vencimientos más este año, el próximo en setiembre. Fuentes del gabinete indicaron a este medio que lo "deseable" es reperfilar ambos, aunque se irá viendo cuánto se puede negociar. Son pagos de intereses y este año viene cumpliendo; el monto a reestructurar son US$1.685 millones de tres bonos emitidos bajo legislación extranjera.

Mendoza mejoró la oferta para reestructurar sus títulos de deuda por US$590 millones y extendió el plazo de negociación; con todo logró atraer al 60% de los acreedores. Necesita sumar el 75% para cerrar; seguirá recibiendo ofertas hasta el próximo viernes. Incumplió un pago de US$25 millones.

Baer afirma que la provincia gobernada por Rodolfo Suárez se vio forzada a negociar "más duro" porque estaba la duda de lo que pasaría a nivel nacional y los acreedores presionan sobre esa base. "Hay una cuestión netamente financiera en la que impacta el acuerdo a nivel nacional y es que les fija una suerte de piso a las provincias –agrega-. Por supuesto, las exigencias de los tenedores de bonos variarán en función del perfil provincial, pero lo que hay que rescatar es que habrá buena predisposición para el diálogo".

Río Negro entró en default y sigue en conversaciones para tratar de llegar a un acuerdo por U$S300 millones que tienen vencimiento 2025; en la provincia esperan que en las próximas semanas se facilite el diálogo por el acuerdo de Nación. La Rioja contrató al Bank of America para el asesoramiento en el canje; desde febrero viene postergando el pago de US$14 millones.

La semana pasada la Legislatura de Salta aprobó la ley de "restauración de la sostenibilidad de la deuda pública", que autoriza al Ejecutivo a utilizar diversas herramientas financieras y legales para renegociar los US$388 millones y que en los próximos años, según sus vencimientos, se "volverían impagables, especialmente por los bonos emitidos en 2016 para conformar el Fondo del Bicentenario", según señalan fuentes oficiales.

Entre Ríos, Santa Fe y Chubut también buscan reperfilar con sus acreedores. "Hay provincias y provincias –insiste Baer-. Algunas pueden garantizar un flujo de pagos relativamente más robusto y a esas se les exigirá más. Colabora que en un contexto global con tasas de interés cero o negativas en términos reales se puedan cerrar acuerdos de créditos de ‘buena calidad’ que se reflejará en una tasa más elevada de lo que se puede conseguir en otros lugares", resume.