Mea culpa de Köhler sobre América latina

BRASILIA.- El titular del Fondo Monetario Internacional (FMI), Horst Köhler, admitió que el organismo de crédito debe reformular su enfoque hacia América latina, y no se refirió a la Argentina durante su primer día en Brasil.

Köhler admitió que el organismo financiero debe definir una nueva forma en sus relaciones con los países de la región, para concentrarse en la prevención de la crisis y en la ayuda al buen desempeño. "Países como Brasil demuestran que el tiempo en el que era necesario decir qué era cierto o errado en la política económica se terminó. El ministro (Antonio Palocci) y el presidente del Banco Central (Enrique Meirelles) saben muy bien qué línea seguir. Por lo tanto, el FMI debe definir ahora un nuevo capítulo en sus relaciones con América latina", dijo Köhler tras reunirse con el presidente Lula y sus funcionarios.

Köhler llegó ayer a Brasilia en una visita de cortesía y hoy brindará una conferencia de prensa en la que se espera alguna referencia a la Argentina. Ayer, el tema no se mencionó públicamente, salvo por una concreta referencia de Palocci al anuncio de Caracas (ver esta página), en un reflejo del escaso interés que despertó en este país la iniciativa que tanto entusiasmó al gobierno argentino.

En su encuentro con la prensa, en el que no se le pudieron formular preguntas, el directivo alemán dijo que el Fondo "tiene que implementar mecanismos para que los países de América del Sur puedan desarrollar proyectos de inversiones en infraestructura, sin perjuicio de la disciplina fiscal", aseguró. "Es preocupante que las inversiones en infraestructura en muchos países de América del Sur hayan declinado en la última década", agregó Köhler, antes de anticipar que ya instruyó a los técnicos del FMI para ver "cómo se puede contribuir, ya este año, para revertir ese proceso".

En el almuerzo -asado, regado con cerveza y vino chileno- participaron Palocci y Meirelles, mientras que el cuestionado jefe de la Casa Civil, José Dirceu, llegó más tarde, pero alcanzó a participar en el encuentro de tres horas. Por el FMI, participó también su vocero, Thomas Dawson.

Palocci informó que durante el almuerzo fue tratada, entre otros temas, la creación de mecanismos preventivos para futuros acuerdos entre el Fondo y países miembros, como el que está en vigor en Brasil, de 14.800 millones de dólares, firmado en noviembre pasado.

"Ya hay una evolución importante en la relación del Fondo con países tomadores de préstamos, de modo que los futuros acuerdos se realicen en la forma de seguros que los países puedan disponer cuando tengan necesidades frente a crisis externas o dificultades inesperadas", explicó Palocci. Luego, Köhler dijo que quedó "impresionado" por los esfuerzos de Lula Da Silva. "Quedé emocionado e impresionado por la forma en que el presidente Lula implementó el programa Hambre Cero", sostuvo el titular del Fondo Monetario. Y agregó: "tengo un buen presentimiento sobre Brasil. Este año regresará a un fuerte crecimiento".

Hoy, Köhler va a Montes Claros, Minas Gerais, por invitación del ministro de Desarrollo Social, Patrus Ananias, para visitar programas sociales financiados por organismos internacionales de crédito. Por la tarde, viajará a San Pablo, donde se reunirá con los ejecutivos de la Federación Brasileña de Asociaciones de Bancos (Febraban).

Brasil tiene desde 2003 un acuerdo tradicional con el FMI, que ahora actúa con un carácter preventivo. Si bien el gobierno enfrenta problemas políticos y recién el nivel de actividad comenzó a despegar, su imagen en los mercados sigue siendo aceptable.