La historia real detrás de la desgarradora película de Netflix que te mantendrá en vilo desde el inicio

Desgarradora, inquietante e histórica. La película El fotógrafo de Mauthausen se estrenó en 2018 y luego se incorporó al catálogo de Netflix. Las producciones basadas en hechos reales se hicieron un hueco entre las favoritas de los suscriptores del gigante de streaming, desde El ángel de la muerte (2022) a Mi gran amiga Ana Frank (2021). Este film producido en España relató una cruda historia bajo la mirada de un activista, que no te dejará despegarte del sillón desde el minuto uno.

“Nadie lo creerá si no lo ve”, expresó Francisco Boix, bajo la voz del actor Mario Casas, en El fotógrafo de Mauthausen. La película, que cuenta con una duración de una hora y 40 minutos y dirigió Mar Targarona, se centró en la mirada del trabajador español, que con una cámara captó la dura realidad de los prisioneros españoles que fueron enviados a los campos de concentración.

El protagonista arriesgará su vida para cumplir el cometido de que el mundo vea el horror que se vivió en los campos de exterminio nazis, a través de los negativos que capturó con su cámara de fotos.

Mario Casas dio vida a Francisco Boix, un fotógrafo y activista español que nació en Barcelona en 1920 y luchó en el Ejército Republicano durante la Guerra Civil. En el período de la Segunda Guerra Mundial, el trabajador fue capturado en el campo de concentración nazi de Mauthausen, en Austria, donde hizo fotos de los horrores que se cometieron ahí.

Boix permaneció en Mauthausen cuatro años, entre 1941 y 1945, junto a más de 7500 españoles, de los cuales 4816 murieron por las condiciones o fueron asesinados en el campo de concentración. Las fotografías que capturó fueron utilizadas en los juicios de Núremberg, en 1946, y sirvieron para inculpar a numerosos jerarcas nazis.

En una entrevista con el medio español RTVE, Mario Casas destacó que utilizó el libro del autor Benito Bermejo para perfeccionar su personaje, Francisco Boix, el fotógrafo de Mauthausen. “Hay secuencias muy duras. Ha sido el papel más difícil de mi vida e incluso me ha cambiado”, señaló el actor.

Y agregó: “Recuerdo una escena, en la que estoy con un nazi en un laboratorio y rompí a llorar. Porque estaba tan metido en el personaje, en el miedo, que no lo pude evitar”.

Quién era Francisco Boix, el fotógrafo de Mauthausen

Francisco Boix murió en 1951 en París, en Francia, a los 31 años. El fotógrafo, que marcó la historia a través de sus documentos visuales en los juicios de Núremberg, asistió como único testigo español. Hijo de un sastre catalán, participó a los 16 años en el diario Juliol, vinculado a las Juventudes Socialistas Unificadas, según relató la Real Academia de la Historia.

Luego de entregar sus fotografías para que el mundo supiera el horror que se vivió en los campos de concentración nazis, Boix se instaló en París y se desempeñó como reportero para el diario francés L’Humanité.

En 1948, durante la cobertura del Tour de Francia, comenzó a sentir los síntomas de una enfermedad que terminaría con su vida tres años después, el 4 de julio de 1951, en un hospital de la capital francesa.

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