Un niño se infiltró en la Casa Blanca y desplegó una alerta de seguridad
Los oficiales del Servicio Secreto se movilizaron y llevaron al menor junto a sus padres, no sin antes interrogarlos sobre el incidente
Un niño entró a la Casa Blanca a través del cerco de metal ubicada en el lado norte, una acción por la que los oficiales de la división uniformada del Servicio Secreto de Estados Unidos desplegaron un operativo de seguridad. No obstante, fue solo un accidente, ya que el menor gateaba por la zona cuando ingresó al terreno presidencial. Las autoridades lo retuvieron por unos instantes para después reunirse con sus padres en la Pennsylvania Avenue.
Los oficiales restringieron el acceso al complejo por un momento, mientras llevaban al pequeño de regreso con sus progenitores, de acuerdo con un comunicado de Anthony Guglielmi, portavoz del Servicio Secreto, citado por AP el pasado 18 de abril. Los papás fueron sometidos a un breve interrogatorio para constatar que todo estuviese en orden y después la familia pudo retirarse del lugar. “Los sistemas de seguridad de la Casa Blanca activaron instantáneamente a los oficiales del Servicio Secreto y el niño y los padres se reunieron rápidamente”, dicta el documento.
Al parecer, el menor pudo entrar por el cerco debido a su tamaño. Ya han sido múltiples niños los que han intentado colarse en la propiedad, pero este fue el primero en lograrlo. “Puede ser la primera intrusión exitosa en el complejo desde que se duplicó la altura del cerco de la Casa Blanca a aproximadamente 13 pies (3,96 metros)”, según la misma agencia citada. Sin embargo, aunque es muy alta, los barandales tienen casi 13 centímetros entre uno y otro.
Los antecedentes
No es la primera vez que un pequeño ingresa sin permiso en las inmediaciones de la Casa Blanca. En 2014 ocurrió algo similar, cuando Barack Obama todavía era presidente. Un niño pasó a través del cerco, justo antes de que el mandatario asistiera a un evento oficial y provocó un retraso en la sesión, así como un cierre temporal del recinto.
Según CNN, en aquella época incluso se bromeó con la situación. “Íbamos a esperar hasta que aprendiera a hablar para interrogarlo, pero en lugar de eso, obtuvo un tiempo fuera y lo enviaron con sus padres”, declaró Edwin Donovan, portavoz del Servicio Secreto de ese entonces.
El castigo por entrar a la Casa Blanca sin permiso
Por ahora no se presentaron cargos por la irrupción del niño, pero entrar a la Casa Blanca sin permiso conlleva un problema legal. De acuerdo con el medio USA Today, los infractores enfrentan desde un año de cárcel hasta diez en caso de que se porte un arma de fuego u otro artefacto peligroso.
Una persona puede ingresar solo si tiene una autorización, según la página oficial del recinto: “El presidente y el Dr. Biden está encantado de dar la bienvenida a los miembros del público para que la visiten. Las solicitudes de recorridos públicos se programan por orden de llegada y deben enviarse a través de un miembro del Congreso y su coordinador de recorridos del Congreso”. Las visitas deben programarse con un mínimo de 21 días de anticipación. “Todos los ciudadanos estadounidenses mayores de 18 años y los ciudadanos extranjeros de todas las edades (incluidos los niños) deben presentar una identificación con foto válida emitida por el gobierno al llegar para su recorrido”, describe el portal.
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