Se compró un 128 Super Europa, lo publicó orgullosa y en las redes se burlaron de ella

Una joven, vecina de la localidad bonaerense de Ituzaingó, esperó 16 años para comprar su soñado 128 Super Europa. Cuando lo logró, le sacó una foto, la publicó en las redes y con un extenso y emotivo mensaje contó su historia de esfuerzo. Sin embargo, si bien hubo muchos usuarios que la felicitaron, otros tantos se burlaron de ella por el modelo de su auto.

“Hoy, en medio de un año realmente difícil, con muchos líos de por medio, y transitando problemas de salud que no hicieron más que posponer mis metas, después de esforzarme muchísimo, de privarme de muchas cosas para llegar, de imaginármelo como algo a futuro, finalmente llego el día”, contó Luly Basile en su posteo de Instagram, en el que posaba junto a su 128, color blanco.

Y continuó: “Al menos 16 años pasaron desde ese momento. Para hoy, finalmente con 21 años, tener ese mismo auto que me llamó la atención de chiquita en una foto; llegó el momento de arrancar este proyecto hermoso que tenía pendiente”. Mientras que en Twitter también publicó la misma imagen, pero con mensaje más corto. “Con esfuerzo y dedicación todo llega. Bienvenido”, dijo. Fue ahí que varios usuarios le respondieron con burlas por el modelo de su auto.

“Muy bien, muy bien. Ya saben.. con esfuerzo y dedicación te volvés a 1985 y te sacás una foto con el auto que iba tu viejo a la escuela”, contestó uno de ellos. En tanto, otro escribió: “¿Un 128? Mamita estamos en la lona como país. ¿Por esto se armó tanto lío? Claramente ni tercer mundo somos, tristeza absoluta”.

“Son todos unos masoquistas cubanos”; “si la intención era: ‘qué ganas de salir a colgar políticos de las b...s en las plazas’, lo lograste”; “ahora de repente se volvió trending topic postear la batata de los 80″, fueron otros de los mensajes críticos.

Sin embargo, la joven que -a juzgar por las publicaciones de sus redes- tiene afición por los vehículos antiguos, vintage o de competición, lejos estuvo de enojarse con quienes la denostaron. “Gracias a todos los que tiraron buena onda, los que felicitaron y comentaron anécdotas o cosas lindas. Y a los que pusieron malos comentarios o críticas, les deseo mucho amor: porque si les influye tanto lo que hace alguien que no conocen como para criticar, entonces les hace mucha falta”, concluyó.

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