Resumen móvil semanal: CES 2019, las ventas de Apple y más allá

La feria CES que terminó el viernes último no dejó mayores novedades respecto del mundo de la computación móvil, más allá de la promesa de que el debut del 5G será fuerte este año, y que los primeros teléfonos llegarán en la segunda mitad de 2019.

Después hubo alguna noticia aislada: la renovación de los relojes Withings, para mí los que mejor commprenden el concepto del reloj híbrido, y que sumaron un modelo con electrocardiograma, y del PowerMax, el reloj que nunca se queda sin batería, y ya.

No obstante, en la feria la prensa internacional pudo ver dos cosas que hasta ahora sólo había visto poca gente.

Por un lado, Flexipai, el smartphone plegable de Royole, conocido más por la rareza (una empresa ignota que se adelanta a los gigantes) que por su futuro: el 20 de febrero, cuando Samsung presente el Galaxy S10, todo indica que también mostrará en detalle su smartphone con pantalla plegable, será apenas un mal recuerdo. Malo, porque es una tecnología que en el caso de Royole es muy limitada y tosca desde el punto de vista del software; ya bastante limitación tiene el concepto en sí: como ya dije en otra ocasión, para mí la mayor ventaja está en pasar de una tableta pequeña a una grande, no de un teléfono pequeño a uno apenas más grande de lo normal. Pero el de Royole estaba ahí, podía tocarse, etcétera. Royole y Samsung no son los únicos; Xiaomi prepara un equpo con dos bisagras, parece, aunque por ahora sólo se conoce un video oscuro que muestra un prototipo.

También aparecieron, cortesía de Huawei, varios teléfonos con el diseño que veremos este año, con la cámara dentro de la pantalla (como un punto negro en la esquina) antes que en el notch. Es una buena solución: salvo alguna que otra ocasión, es fácil olvidar que la cámara está ahí, y el cerebro es particularmente adepto a ignorar estas cosas, así que termina siendo realmente invisible.

Los últimos días estuvieron marcados, no obstante, por una noticia a la que algunos le pusieron tinte de cataclismo: Apple avisa que recalcula las ventas del trimestre, que serán más bajas de lo previsto. ¿Es importante? Sin duda; Apple parecía inmutable a los vaivenes del mercado. Pero China es uno de sus clientes principales, y China está pasando por un momento de desaceleración económica que impacta en todos los fabricantes (paradójicamente, a la que menos afecta es a Samsung, que casi no tiene participación en el mercado chino). De hecho, tanto LG como Samsung ya avisaron que también tienen un trimestre complicado por menores ganacias a lo previsto en el mercado de smartphones.

Acá, unos datos de Canalys para ponerle contexto al asunto (en breve: el problema en China es para todo el mercado, no sólo para el fabricante del iPhone). Esto no quita que lo de Apple sea una simple anécdota; pero por cómo está constituido el universo Apple (por la fidelidad que tiene su público, en su mayoría muy dispuesto a gastar lo que le pidan), debería ser mucho más resistente, a largo plazo, a este tipo de dificultades; mucho más que sus competidores. En este análisis de Ben Thompson está muy bien explicado.

Por lo pronto, parece que Apple recortará la producción del iPhone XS y XR en un 10 por ciento para los próximos tres meses. Aunque todos los años, sin excepción, se dan estas noticias (Apple siempre pide a sus proveedores, después del período inicial que tiene el pico de demanda, que bajen la producción), en este caso es más tarde de lo usual, por lo que se toma como otro indicio del freno de ventas del iPhone (CNet)

Durante la CES pude hablar con Kyle Wiens, el fundador de iFixit, una referencia fundamental a la hora de "destripar" un teléfono y ver cómo está hecho, qué se puede reparar y qué no.

Durante los últimos días contamos también cuáles son las promociones de las compañías nacionales en materia de roaming (con paquetes que alivianan o anulan el impacto para los abonos más caros).

También, que Apple podría sumarse a la ola de la multiplicidad de objetivos y ofrecer, este año, un iPhone con tres cámaras traseras, como ya tienen Huawei, Samsung y otros.

Sony podría tener una alternativa al Face ID de Apple usando cámaras que miden el tiempo de vuelo (ToF) entre el pulso de luz y su rebota en la cara del usuario; funciona, como la tecnología de Apple, haciendo un mapa 3D del rostro del usuario, pero tiene la ventaja de que se puede usar a mayor distancia (The Verge) Vivo viene usando algo similar desde mediados de 2018. La ventaja de funcionar a mayor distancia es que sirve de pseudo-Kinect.

El proceso para validar una actualización de software en Android es compleja, y en HMD hicieron una infografía mostrando todo el camino desde que Google publica una nueva versión hasta que está en el equipo, incluso en versiones con tan pocos cambios como en Android One (que Nokia usa con éxito en toda su oferta. ¿En iOS no pasa? Sí, pero tiene la ventaja de que el número de dispositivos para homologar es menor, y es la misma compañía, etcétera, por lo que los primeros pasos están unificados. Pero la parte de que los operadores lo aprueben se hace también, sólo que antes. (HMD, es un PDF)