ANSA/ Ucrania: Nuevo round de negociaciones en Miami, "todavía mucho por hacer"
Rubio: "No impondremos un acuerdo". Ucranianos y rusos en Florida

De hecho, la nueva ronda de negociaciones en Miami se centra esencialmente en esas cuestiones.
Sin embargo, la presión diplomática del presidente estadounidense, Donald Trump, debe lidiar con las diferencias entre Moscú y Kiev.
Al respecto, se refirió el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio: "Hemos avanzado, pero aún nos queda mucho camino por recorrer".
En ese sentido, destacó que Estados Unidos no tiene intención de imponer un acuerdo.
La situación en Miami es diferente, con Washington alternando entre rusos y ucranianos.
Los líderes estadounidenses siguen siendo el enviado especial Steve Witkoff y el yerno de Donald Trump, Jared Kushner.
Mientras, los ucranianos están liderados por el negociador jefe Rustem Umerov, acompañado por el general Andriy Gnatov, quienes permanecerán en Miami hasta el sábado.
Por otro lado, están los negociadores rusos, encabezados por el asesor del Kremlin, Kirill Dmitriev.
Las conversaciones, por invitación de Estados Unidos, también involucran a sus socios europeos.
Los asesores de seguridad nacional de Francia, el Reino Unido y Alemania participan en las reuniones con los ucranianos.
Sin embargo, no están previstas conversaciones entre los europeos y los rusos.
Según Axios, Turquía y Qatar también están presentes en la nueva ronda de consultas.
El punto de discordia es la última versión del plan de paz, discutida en Berlín el domingo y el lunes pasados.
En ese sentido, genera mucha controversia la exigencia de Moscú de que Ucrania abandone las posiciones que le quedan en las regiones de Donetsk y Luhansk, en el Donbás.
Esta concesión es inaceptable para Kiev, que se niega a reconocer el Donbás como ruso.
Ucrania, por su parte, insiste en garantías de seguridad fiables en caso de un nuevo ataque por parte de Moscú.
El acuerdo parece haberse alcanzado con base en una garantía similar a la del Artículo 5 de la OTAN, proporcionada por los europeos con el apoyo estadounidense.
Sin embargo, Rusia ya rechazó categóricamente la presencia de tropas de la OTAN en territorio ucraniano.
Umerov lo dejó claro antes de sentarse a la mesa: "Actuamos claramente en consonancia con las prioridades establecidas por el presidente (Volodimir) Zelensky: la seguridad de Ucrania debe garantizarse de forma fiable y a largo plazo".
Mientras, el presidente ruso, Vladímir Putin, insistió en la cuestión fronteriza: "Rusia —dijo— aún no ve la disposición de Kiev a abordar la cuestión territorial".
Por lo tanto, las conversaciones podrían centrarse en la revisión de las líneas de ataque sobre el terreno y la presencia de una fuerza multinacional apoyada por el grupo de los voluntarios.
se podría ser, en última instancia, el punto de inflexión: concesiones territoriales de Ucrania a cambio de garantías de seguridad occidentales.
Por supuesto, Miami no es la etapa final de las negociaciones.
Para el Kremlin, la pelota en las negociaciones está en el tejado de Kiev y sus aliados europeos.
Pero Umerov, aunque aseguró que Ucrania aborda las conversaciones con una actitud constructiva, informará al presidente Zelensky al final de las consultas. (ANSA).



