ANSA/ Venezuela: EEUU busca la asfixia económica del chavismo
Para analistas, la incautación de buques trata de golpear las finanzas de Caracas

Una vez que se inició la operación naval y militar, Estados Unidos ejecutó numerosos ataques cinéticos contra embarcaciones pequeñas, tanto en el Caribe como en el Pacífico oriental. El hundimiento de las llamadas "narcolanchas" dejó un saldo, a la fecha, de más de 100 personas fallecidas por las acciones militares de Washington.
Desde inicios de octubre último, en tanto, el presidente Trump ha asomado la posibilidad de ataques terrestres, diciendo que se pondría en marcha la "fase 2" de la estrategia, la cual inicialmente estaba enfocada en una narrativa de golpear al tráfico de drogas. Con el paso de las semanas y las amenazas de acciones terrestres, creció la presión directamente sobre Caracas, estando en juego la permanencia de Nicolás Maduro en el poder.
Las acciones terrestres no se han producido aún y Estados Unidos puso en marcha un giro inesperado hace dos semanas: la incautación de buques que operan desde o hacia Venezuela. Se trata de embarcaciones sobre las que pesan sanciones previas de Washington.
"La interdicción de buques y el despliegue de la operación naval en el Caribe buscan estrangular el flujo de caja del régimen al golpear su principal pulmón financiero, las exportaciones petroleras", comentó a ANSA el analista Benigno Alarcón, exdirector del Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello.
Nicolás Maduro, este domingo, tachó de "piratería de corsarios" estas confiscaciones y dijo que su país "tiene 25 semanas denunciando, enfrentando y derrotando una campaña de agresión que va desde el terrorismo psicológico hasta los corsarios que han asaltado petroleros".
Caracas implementó, además, otra estrategia en respuesta a las acciones ordenadas desde la Casa Blanca. Ahora el gobierno de Maduro informa de manera detallada y hasta con videos sobre la salida de buques, como este domingo que reportó uno con destino a Estados Unidos, operado por la petrolera estadounidense Chevron, que cuenta con un permiso especial para seguir operando dentro del país sudamericano.
Hasta ahora, pese a que existe un discurso de confrontación, Estados Unidos se ha cuidado de no cruzar la frontera marítima con Venezuela. Tanto los ataques a las "narcolanchas" como estas nuevas acciones de tomar buques petroleros tienen lugar en aguas internacionales. Sin embargo, los aviones de combate y los vuelos de inteligencia sí han realizado acciones de reconocimiento dentro del espacio aéreo venezolano, tal como ha denunciado el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.
El gobierno de Maduro ha evitado responder militarmente a estos vuelos. (ANSA).



