ANSA/EEUU: Trump recibe duras críticas por dichos sobre la muerte de Rob Reiner
Utilizó expresiones asociadas al "Trump Derangement Syndrome"

Durante declaraciones públicas, Trump utilizó expresiones vinculadas al denominado "Trump Derangement Syndrome" (TDS, que podría ser traducido como obsesión enfermiza con Trump), —un término frecuentemente empleado por el mandatario y sus aliados para desacreditar a críticos y opositores— al referirse al fallecimiento del cineasta, lo que fue interpretado como una falta de respeto y una politización de un hecho luctuoso.
Las declaraciones provocaron rechazos inmediatos tanto de legisladores demócratas como de sectores republicanos, además de figuras del ámbito cultural, académico y mediático. Varios dirigentes calificaron los dichos como "innecesarios", "insensibles" y "divisivos", en un contexto político ya marcado por fuertes tensiones internas.
Rob Reiner, una figura influyente del cine estadounidense y conocido por su postura crítica frente a Trump, había sido en reiteradas ocasiones blanco de ataques verbales del presidente.
No obstante, analistas señalaron que el cruce de declaraciones tras su muerte representa un nuevo punto de fricción en la relación entre la Casa Blanca y sectores clave de la sociedad civil.
Hasta el momento, la Casa Blanca no emitió una aclaración formal ni rectificación sobre los comentarios, mientras que aliados del presidente minimizaron la controversia, enmarcándola dentro de la retórica habitual de Trump frente a sus adversarios políticos.
Según analistas, el episodio vuelve a poner en evidencia uno de los rasgos más persistentes de la presidencia de Trump: la incapacidad —o la falta de voluntad— de separar el conflicto político del respeto institucional y humano. Al referirse a la muerte de Reiner en términos cargados de ironía y desdén, Trump no solo atacó a un crítico histórico, sino que cruzó un límite simbólico que incluso parte de su base considera incómodo.
El uso del concepto de "Trump Derangement Syndrome" en este contexto no es casual. Forma parte de una estrategia discursiva que busca deslegitimar toda crítica, reduciéndola a una patología emocional del adversario. Sin embargo, aplicada a un hecho luctuoso, la fórmula pierde eficacia política y amplifica la percepción de insensibilidad.
Rob Reiner, reconocido director, actor y productor estadounidense, fue asesinado, junto con su mujer, el domingo pasado, según la policía por su propio hijo, afectado por una severa adicción a las drogas.
Figura central del cine y la televisión en Estados Unidos durante varias décadas, Reiner fue responsable de títulos emblemáticos como "When Harry Met Sally", "Misery", "A Few Good Men" y "The Princess Bride", y también tuvo una extensa carrera como actor. (ANSA).



